MEXICO, 27 dic (Xinhua) -- El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, presentó hoy un plan nacional para combatir "de manera frontal" el robo de combustible, delito que, según afirmó el mandatario, dejó pérdidas al país por 60.000 millones de pesos (más de 3.000 millones de dólares) el año pasado.
López Obrador expuso en su rueda de prensa matutina en la capital mexicana que el plan involucra a 15 entidades del gobierno federal y busca aprobar una reforma constitucional para convertir el robo de combustible "en delito grave", para que los infractores cumplan penas de cárcel sin derecho a fianza.
"El objetivo de este plan es terminar con el robo, con la corrupción, y quiero hacer un llamado a los mexicanos a denunciar", exhortó.
El mandatario mexicano, quien estuvo acompañado por su gabinete de seguridad, reconoció la necesidad de llevar a cabo "acciones de carácter urgente", porque este delito implica la fuga de dinero público.
"Tres años de robo de combustible es el equivalente a una refinería nueva", recalcó.
Sostuvo que dicho flagelo es una práctica que no es exclusiva del llamado "huachicoleo" (robo de combustible), a cargo de organizaciones criminales y bandas, sino que también es desde la propia empresa estatal Petróleos Mexicanos (Pemex).
Explicó que del total del robo de hidrocarburos, solo el 20 por ciento se va en la "ordeña" de ductos y que el resto se distribuye en camiones cisterna, por la complicidad de funcionarios que operan dentro de Pemex.
Dijo que ante ello se cesó a funcionarios de la empresa estatal desde el pasado 20 de diciembre y una vez detenidos se redujo en un 17 por ciento el robo de combustible.
Explicó que antes de esta acción, se robaron hasta 1.300 camiones cisterna de gasolina en las instalaciones de Pemex.
"Se hizo normal este robo (...) hay expendios de combustible robado. Un llamado a que no se compre combustible robado a la nación, al pueblo", expresó López Obrador.
"Un llamado a los transportistas para que no transporten, no trasladen gasolina, diésel robado. Un llamado a todas las familias, a los jóvenes", ahondó el gobernante.
En tanto, el titular de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), Luis Cresencio Sandoval, comentó que el plan contempla la vigilancia de 58 instalaciones de Pemex por parte de elementos militares y navales.
Estos elementos controlarán la entrada y salida de camiones cisterna de las instalaciones, así como la distribución de combustible.
Según detalló Sandoval, el Ejército estará presente en 30 terminales de abastecimiento y despacho, así como en cuatro refinerías, mientras que la Secretaría de Marina vigilarán nueve terminales de abastecimiento y despacho, así como dos refinerías.
Corresponderá a la Secretaría de Marina y la Sedena "vigilar las instalaciones y refinerías de Pemex para evitar más robo de hidrocarburo", enfatizó.
Pemex ha presentado a la Procuraduría General de la República (PGR, fiscalía) denuncias por las tomas clandestinas de combustible, que han pasado de 3.267 en 2012 a 6.898 el año anterior.