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La resolución de la OMC no debe considerarse una "victoria" o "derrota"

Nota: Tomado de "Comentarios sobre asuntos internacionales ", publicado originalmente en idioma chino.

Beijing,22/04/2019(El Pueblo en Línea) - Este jueves, la Organización Mundial del Comercio (OMC) publicó un informe del grupo especial sobre el caso que presentó Estados Unidos en diciembre del 2016 contra China, debido al uso de contingentes arancelarios (cantidades preestablecidas de productos que pueden ser importadas a un tipo “preferencial” de derecho de aduana) para el trigo, el arroz y el maíz. El grupo especial de la OMC dictaminó que la administración china violaba su compromiso de transparencia, al tiempo que rechazó la apelación estadounidense que exigía que China publicara información sobre los contingentes arancelarios.

China siempre ha sostenido que sus controversias comerciales con otros miembros de la OMC deberían tratarse adecuadamente, de conformidad con los procedimientos de solución de diferencias que mantiene la organización. Y no solamente toma la iniciativa de presentar alegaciones con el fin de salvaguardar sus intereses jurídicos y la autoridad de las normas de la OMC, sino que también responde activamente a los cargos, y respeta y aplica las resoluciones de la OMC.

La resolución de la OMC sobre esta diferencia demuestra que la organización desempeña un papel importante en la salvaguarda del sistema multilateral de comercio. No es una mera cuestión unilateral que busca la victoria de unos contra otros.

El sistema multilateral de comercio, con la OMC como núcleo, ha sido un pilar en la promoción del desarrollo económico mundial y la construcción de una economía mundial abierta. El sistema de solución de diferencias de la OMC es el tribunal supremo que trabaja por resolver controversias comerciales, buscando mantener un equilibrio entre los derechos y obligaciones de los miembros de la OMC y la tarea de garantizar una aplicación efectiva de los principios y normas de la propia organización.

Hasta la fecha, a través del sistema de solución de diferencias de la OMC se han tramitado más de 500 casos. Si bien las resoluciones no son vinculantes, la mayoría de los miembros de la OMC las toman con seriedad y consideran que el proceso es una parte regular de su participación en el sistema multilateral de comercio, independientemente si ganan o pierden algún caso en particular. Al actuar de este modo, demuestran su respeto por los principios de consulta y consenso de la OMC.

Hasta abril del 2018, China había presentado 17 casos ante la OMC, de los cuales 8 están cerrados. Asimismo, se habían presentado 27 casos contra China. Del total, 23 casos están cerrados. Los Estados Unidos han recibido más casos en su contra que cualquier otra nación miembro de la OMC, y han perdido bastantes de estas reclamaciones. En 2016, por ejemplo, la OMC resolvió contra Estados Unidos una denuncia china del 2013 que señalaba que Estados Unidos había violado las normas de la OMC al imponer derechos antidumping (serie de medidas de defensa comercial que se llevan a término cuando un suministrador extranjero impone precios inferiores a los que aplica en su propio país) a varias industrias, entre ellas a la maquinaria, la electrónica, la industria ligera, los metales y la minería.

Una amenaza para la viabilidad del actual sistema de solución de diferencias de la OMC es el unilateralismo y el proteccionismo de los Estados Unidos. Concretamente, este mecanismo está en crisis porque los Estados Unidos han impedido el nombramiento de nuevos jueces ante el órgano de apelación. Los expertos han advertido que si el órgano de apelación se cerrara debido a la falta de jueces, la gobernanza del comercio mundial se atrasará 20 años.

Por supuesto, la OMC también necesita reformarse de forma permanente para que pueda mantenerse al día. Al respecto, muchos países han presentado sugerencias. Por ejemplo, la Unión Europea ha publicado un documento en el que expone ideas para una amplia modernización de la OMC. También Estados Unidos, Europa y Japón han presentado conjuntamente sus propias propuestas de reformas. En noviembre del año pasado, China anunció que apoyaba las necesarias reformas a la OMC, y planteó cinco propuestas que tienen por objetivo de mantener la firmeza del sistema multilateral de comercio basado en normas, resistir el proteccionismo y permitir que la OMC desempeñe un papel más destacado dentro del comercio mundial.

La solución de la controversia sobre los productos agropecuarios entre China y Estados Unidos no es nada fuera de lo común: es una parte regular del compromiso de China con el sistema de comercio basado en normas. Como lo ha dicho el Sr. Pascal Lamy, ex director general de la OMC, " Desde su adhesión a la OMC, China ha entregado una "actuación A+". Ningún miembro de la OMC ha sido un intérprete perfecto cuando se trata de normas de la OMC, ya que cada país tiene su propia interpretación de dichas normas.

China considera que todas las diferencias de solución de controversias en el marco de la OMC son una oportunidad para ajustar y mejorar continuamente sus prácticas comerciales. A través del proceso, China consultará extensamente con otros miembros de la OMC con el fin de promover reformas dentro de la organización que mejoren su autoridad y la eficacia, para que la OMC pueda salvaguardar de una mejor manera el libre comercio y el sistema multilateral de comercio.