SANTIAGO, 29 jun (Xinhua) -- La demanda de vuelos por parte de turistas, científicos y aficionados que viajan hacia el norte chileno ha aumentado conforme se acerca el eclipse solar, pero sólo unos pocos tendrán el privilegio de apreciar este fenómeno desde las ventanillas de un avión, con vista a los cielos más prístinos del planeta.
Los ojos del mundo están puestos en Chile y en los despejados cielos del desierto sudamericano, que acogerán el 2 de julio un eclipse de sol que tendrá su punto de oscuridad desde la localidad de Domeyko hasta el balneario de Guanaqueros, entre las regiones Coquimbo y Atacama.
Para alcanzar la mejor ubicación, dos aviones despegarán desde Santiago ese día con 70 pasajeros cada uno, quienes podrán ver desde la altura la cobertura total del sol, mientras sobrevuelan el océano Pacífico.
Para la ocasión, se eligieron dos Airbus A320neo; uno de ellos será pilotado por el candidato a astronauta chileno, Klaus von Storch.
"El desafío es llegar al punto preciso en el momento exacto", dijo a Xinhua Von Storch, quien deberá ascender a los 39.000 pies de altura y quedar de manera perpendicular al sol, por lo que el eclipse total sólo será visible desde el costado izquierdo del avión.
La travesía partirá de la capital chilena a las 15:35 hora local (19:35 GMT), pero el momento de oscuridad se producirá a las 16:38 (20:38 GMT), y se extenderá por dos minutos y 36 segundos.
En ese instante, la nave estará posicionada en un corredor de 147 kilómetros de ancho que permitirá "ver en plenitud" el evento, señaló el también miembro de la Fuerza Aérea de Chile.
Esta será la primera vez en sus 40 años de carrera profesional que el ingeniero aeroespacial y piloto de la aerolínea Sky observa un eclipse desde el aire, sin embargo, cuenta que ha tenido la suerte de presenciar maravillosas postales durante sus viajes.
"Desde la altura el aire es más limpio y nítido. He podido observar y sacar fotos hermosas desde el cielo. En este caso, la idea es tener un campo visual amplio, no solo en el momento del eclipse, sino también en los momentos previos", sostuvo.
La aerolínea SKY trabaja hace más de un año con el canal de televisión National Geographic en esta iniciativa que busca acercar la ciencia a la ciudadanía, para lo que lanzó un concurso entre sus seguidores e invitó a niños, niñas y jóvenes a "vivir esta experiencia inolvidable".
Paloma Reyes, de 15 años, es una de los estudiantes que "volarán hasta el eclipse", algo que "parecía un sueño y nunca habría imaginado", afirmó.
Reyes quiere ser astrónoma y piensa que ahora existen herramientas para que la ciencia, las investigaciones y los descubrimientos avancen.
Además, cree en el talento de los jóvenes, en particular de las mujeres, por lo que integra la plataforma que visibiliza el trabajo de sus pares, "Tremendas".
"Es importante que la gente se enganche con la ciencia, que se interese. Por esto, es muy importante que se fomenten estas oportunidades únicas, para que haya más motivación por la astronomía, en este caso", dijo la estudiante del colegio Saint George, ubicado en el sector este de la capital.
La línea aérea organizadora ha destacado la disposición y el esfuerzo por parte de las autoridades, expertos y los funcionarios de la Administración Nacional de la Aeronáutica y del Espacio (NASA) de Estados Unidos, en la coordinación y definición del mejor recorrido para observar el fenómeno, ya que "si vuelas muy abajo corres el riesgo de que esté nublado, pero debiera estar despejado a más altura", explicó Von Storch.
El experto de la Dirección de Meteorología de Chile, Arnaldo Zúñiga, coincidió con el piloto chileno, al pronosticó para el próximo martes cielos con nubosidad en la zona de Atacama y algo menos en Coquimbo, sector que se irá despejando por la tarde.
"Si se vuela sobre la capa de nubes, se tiene una visión privilegiada. Arriba hay menos contaminantes, humedad y el aire es más transparente. El paisaje es espectacular", señaló Zúñiga.
En tierra firme, el equipo de la Dirección General de Aeronáutica Civil vigilará desde el aeropuerto de La Serena las operaciones en el aire, a través de un plan de contingencia que implica reforzar turnos, trabajar a máxima capacidad y con base en la seguridad de casi un millón de turistas que se esperan en el norte de Chile con motivo del eclipse, según la Cámara Nacional de Comercio.
El jefe del aeropuerto "La Florida", Manuel Aguirre, aseguró que reciben normalmente 2.200 pasajeros diarios, no obstante, esperan que la cifra alcance por estos días los 5.000.
Pese a lo compleja que ha resultado la planificación, Aguirre dijo estar entusiasmado frente al suceso que ha concitado la atención de miles de científicos y aficionados de todo el mundo, y espera "que las condiciones meteorológicas nos ayuden y podamos ver el eclipse desde cualquier punto".
Chile será el principal destino de turismo astronómico en 2019 y 2020, ya que dos eclipses solares tendrán lugar en el sur y norte del país, que en coincidencia alberga a importantes observatorios internacionales.
Ambos eclipses serán visibles de manera parcial en una amplia parte del hemisferio sur.
Chile tiene en la actualidad el 40 por ciento de la superficie colectora de telescopios ópticos e infrarrojos del mundo, además se calcula que para 2025 el país alcanzará el 70 por ciento de la capacidad de observación.