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COMENTARIO: La política de defensa de China está orientada a la defensa y a la paz

BEIJING, 24 jul (Xinhua) -- El décimo libro blanco de defensa de China publicado hoy es una prueba sólida de que la política militar del país está orientada hacia la defensa y la paz.

Aunque desde hace mucho tiempo es política exterior de China nunca buscar hegemonía, expansión o esferas de influencia, el documento, titulado "Defensa Nacional de China en la Nueva Era", ha asumido por primera vez este compromiso como un rasgo distintivo de la política nacional en la nueva era.

Esto ejemplifica el carácter defensivo de la política de defensa nacional de China, un marcado contraste con los de ciertas potencias mundiales que adoptan estrategias militares e intervención preventivas, una tendencia desafortunada que ha demostrado dañar la paz y la estabilidad mundiales.

La historia nos ha enseñado que, si bien un país puede volverse "fuerte", la belicosidad llevará a su ruina. La nación china siempre ha amado la paz, pero ciertos medios de comunicación y políticos occidentales ignoran el hecho y difunden información engañosa sobre la política de defensa nacional defensiva de China.

Una de las nociones infundadas se refiere a los gastos de defensa de China. Si bien China ha aumentado su gasto en defensa desde un nivel de sostenibilidad hasta uno de crecimiento moderado en los últimos 40 años, el crecimiento está en sintonía con el de la economía nacional y el gasto gubernamental.

Según el último libro blanco de defensa, el gasto de defensa de China como porcentaje del PIB ha bajado del máximo de 5,43 por ciento registrado en 1979 al 1,26 por ciento de 2017, mientras que como porcentaje del gasto gubernamental ha bajado del 17,37 por ciento de 1979 al 5,14 por ciento de 2017.

Debería recordarse a los detractores con prejuicios arraigados contra China que el gasto de defensa per cápita de China sigue siendo bajo, en comparación con el de otras grandes potencias.

Tomemos como ejemplo las cifras de 2017. El gasto de defensa per cápita de China fue de 750 yuanes o alrededor de 108 dólares estadounidenses, un mero 5 por ciento de la cifra de Estados Unidos.

En los últimos años, aunque la cooperación de beneficio mutuo sigue siendo una tendencia irreversible, aún hay factores desestabilizadores e incertidumbres en la seguridad internacional.

Mientras que algunas de las grandes potencias están desarrollando nuevas formas de contrarrestar a las otras fuerzas armadas y acelerando el ritmo de los preparativos de combate, China se ha resistido decididamente a participar en cualquier carrera armamentista.

En cambio, China ha reducido constantemente la tasa de crecimiento de su presupuesto de defensa y ha dedicado el gasto a promover reformas militares y de defensa, a apoyar el entrenamiento militar, a modernizar armas y equipos, y a mejorar el bienestar del personal de servicio.

Otra noción engañosa e incendiaria afirma que China está extendiendo su alcance militar en detrimento de la estabilidad regional.

Esta opinión hace la vista gorda al hecho de que China, al igual que cualquier otro país, tiene derecho a salvaguardar resueltamente su soberanía nacional e integridad territorial y disuadir a cualquier intrusión extranjera.

También se debe recordar a los detractores que China tiene un historial comprobado en el mantenimiento de la paz dentro de la región y la región de Asia y el Pacífico sigue siendo una parte estable en el panorama mundial.

Con el compromiso de construir una comunidad con un futuro compartido en su vecindario, China ha abogado durante mucho tiempo por abordar las diferencias y disputas a través del diálogo y la consulta, una decisión ampliamente recibida por los países vecinos.

Mientras tanto, China se esfuerza por profundizar la asociación militar y la confianza mutua con sus vecinos, con más de 40 visitas recíprocas de militares a nivel de comandantes de servicio y superiores cada año.

China también ha establecido consultas de defensa y seguridad, así como mecanismos de reuniones de trabajo con 17 países vecinos para mantener abiertos los canales de intercambio.

La construcción de una comunidad con un futuro compartido para la humanidad se ajusta a las tendencias de los tiempos para el desarrollo pacífico y refleja las aspiraciones comunes de todos los pueblos en el mundo. Como una potencia importante, la política de defensa nacional orientada a la defensa y la paz de China es una bendición para la paz mundial duradera.