Oficiales y otros miembros del personal de la guarnición de Hong Kong del Ejército Popular de Liberación ayudan a despejar una calle al frente del Cuartel Kowloon. Este 16 de noviembre de 2019. Su operación ganó el aplauso de los residentes. [Foto: China Daily]
Reacciones positivas
Las grandes perturbaciones al orden público provocaron reacciones públicas positivas. Un gran grupo de personas despejó voluntariamente los escombros y restos dejados por los alborotadores. Este sábado, el tráfico en la mayoría de las carreteras, incluyendo Tolo, se reanudó gradualmente.
"Sus conmovedoras acciones demuestran su amor por Hong Kong e inyectan energía positiva a la sociedad", destaco un portavoz del gobierno de Hong Kong en un comunicado de prensa, emitido en la noche del sábado.
Cientos de residentes también despejaron la calle Pok Fu Lam, cercana a la Universidad de Hong Kong, otra de las bases de los extremistas. Sin embargo, desde un paso elevado adyacente, un grupo enmascarado boicoteó la limpieza. Nadie resultó herido.