El mundo siente las sacudidas del cambio climático

Pueblo en Línea  2020:01:06.16:20

Por Chen Weihua

Bomberos australianos tratan de salvar una vivienda en Kulnura, Nueva Gales del Sur, diciembre del 2019. [Foto: Agencias]

Nueva Gales del Sur, 06/01/2020 (El Pueblo en Línea) -Los terribles incendios forestales en Australia, además de generar titulares en todo el mundo, han dejado ciudades, pueblos y vastas áreas del campo envueltas en una densa humareda contaminante.

Entre las víctimas mortales se reportó a un bombero voluntario que luchaba contra un incendio en Nueva Gales del Sur. Hasta la fecha, el siniestro ha destruido 900 viviendas, y se espera que esta cifra aumente.

A finales del mes pasado, las imágenes de un koala deshidratado que se acercaba a un ciclista para rogarle que le diera agua, escena captada en medio de una carretera cerca de Adelaida, Australia del Sur, y a 40 grados celcius de temperatura, impresionaron al mundo.

En Nueva Gales del Sur se estima que 8.000 koalas, alrededor de un tercio del número de los censados en ese estado, han muerto en los incendios.

De acuerdo a los ecologistas de la Universidad de Sídney, unos 480 millones de mamíferos, aves y reptiles han sido víctimas fatales -directa o indirectamente- de las llamas asesinas, indicó el portal digital Sydney News& Life.

Asimismo, una declaración emitida por 22 organizaciones sanitarias y médicas define que la contaminación atmosférica causados por los incendios es una "emergencia de salud pública".

Asi las cosas, el 30 de diciembre fueron emitidas nuevas advertencias de emergencia: se instó a unos 40.000 turistas a evacuar Gippsland Oriental, un complejo turístico en el estado de Victoria, en el sureste del país. A muchos que han ignorado la instrucción, se les ha reiterado que pudiera ser demasiado tarde y que deben evacuarse de inmediato.

Ese mismo día, los seis estados australianos y el Territorio del Norte reportaron temperaturas superiores a 40 grados celcius. En Nueva Gales del Sur, ese día hubo cerca de 100 incendios forestales cuando el sol comenzó a castigar los secos bosques.