JIUQUAN, 8 may (Xinhua) -- La cápsula de retorno de la versión de prueba de la nave espacial tripulada de nueva generación de China regresó con éxito a las 13:49 de hoy viernes (hora de Beijing) al sitio de aterrizaje de Dongfeng, en la región autónoma de Mongolia Interior, en el norte del país, informó la Agencia de Vuelos Espaciales Tripulados de China (CMSA, siglas en inglés).
La prueba fue un éxito total, aseguró la agencia.
Siguiendo las instrucciones del Centro de Control Aeroespacial de Beijing, la nave experimental aplicó el freno y entró en la órbita de retorno a las 12:21 horas. La cápsula de retorno se separó de la de servicio a las 13:33 horas.
Después de que la cápsula volvió a entrar en la atmósfera y alcanzó la altitud designada, se abrieron los dos paracaídas de desaceleración y tres paracaídas principales en la cápsula de retorno, lo que disminuyó la velocidad de vuelo de la cápsula a la de conducción de un vehículo urbano. Antes del aterrizaje, sus seis bolsas de aire se desplegaron e inflaron para garantizar un aterrizaje suave, según explicó la Corporación de Ciencia y Tecnología Aeroespacial de China (CASC, siglas en inglés).
A las 13:49 horas, la cápsula de retorno aterrizó a salvo. El equipo de búsqueda la encontró en el plazo debido y confirmó que su estructura estaba intacta.
China lanzó el martes la versión de prueba sin tripulación de la nueva nave espacial, que fue transportada a la órbita por el cohete portador Gran Marcha-5B desde el Centro de Lanzamiento Espacial Wenchang en la provincia insular de Hainan, en el sur del país.
La nave espacial experimental voló en órbita durante dos días y 19 horas, llevando a cabo una serie de experimentos espaciales de ciencia y tecnología, indicó la CMSA.
También se probaron tecnologías clave, incluyendo el blindaje térmico y el control durante el reingreso en la atmósfera, así como la recuperación y la reutilización parcial de sus múltiples paracaídas, precisó la CMSA.
La nave tripulada de nueva generación es un vehículo de transporte espacial avanzado adaptado a múltiples tareas. Se puede emplear no sólo en misiones de órbita terrestre baja para apoyar la construcción de la estación espacial de China, sino también para la exploración en el espacio profundo, como misiones tripuladas a la Luna, detalló la CMSA.
Desarrollada por la Academia de Tecnología Espacial de China (CAST, siglas en inglés), subordinada al CASC, la nave espacial de prueba mide casi 9 metros de altura y unos 4,5 metros en su punto más ancho. Pesa más de 20 toneladas.
A diferencia de la estructura de tres cápsulas de las naves espaciales de Shenzhou actualmente en uso, la nueva nave espacial comprende una cápsula de retorno, que sirve de centro de comando y lugar de estar para los astronautas, así como una cápsula de servicio, que proporciona potencia y energía, según la CAST.
En las naves espaciales de Shenzhou, los astronautas tienen que ir y venir entre dos cápsulas más pequeñas para hacer sus tareas cotidianas y trabajar. La cápsula de retorno de la nueva nave tiene un mayor espacio sellado. En el futuro, se puede dividir para establecer un área de trabajo, un área de entretenimiento, y otra área de comedor y baño, a fin de brindar un ambiente de vida más cómodo para los astronautas.
La cápsula también se puede equipar con pantallas grandes para entretenimiento e instrumentos de visualización conectados con dispositivos portátiles para que los astronautas puedan disfrutar de coloridos viajes espaciales y mantenerse informados de las condiciones de la nave.
El nuevo diseño también puede acortar el ciclo de desarrollo de la nave espacial y reducir los costos de desarrollo, lo que será una ventaja significativa en el futuro con actividades de exploración espacial cada vez más frecuentes.
Los investigadores han integrado el suministro eléctrico, la propulsión, los recursos de combustible y otros subsistemas en la cápsula de servicio, de modo que la misma cápsula de retorno se puede combinar con diferentes cápsulas de servicio para satisfacer diferentes necesidades de múltiples tareas, incluidas la operación de la estación espacial y las posteriores misiones espaciales tripuladas.
La cápsula de retorno está diseñada para ser reutilizable. Se han trasladado los sensores de estrella, las computadoras y otros equipos de alto valor de la cápsula de servicio a la cápsula de retorno para que puedan reciclarse después de su regreso a la Tierra.