WASHINGTON, 6 mar (Xinhua) -- El compromiso sólido del Gobierno, la implementación nacional efectiva, así como el control de la corrupción y las evaluaciones realizadas por terceros son tres principios importantes que otros países en desarrollo pueden aprender del éxito de China en cuanto a reducción de la pobreza, afirmó un destacado experto estadounidense.
"He pensado mucho en cómo se puede beneficiar el mundo, en particular los países en desarrollo y los más pobres, de la experiencia de China en reducción de la pobreza", dijo a Xinhua en una entrevista reciente Robert Lawrence Kuhn, presidente de la Fundación Kuhn.
El pasado 25 de febrero, el presidente chino, Xi Jinping, anunció que China había conseguido una "victoria completa" en su lucha contra la pobreza extrema.
A lo largo de los ocho años transcurridos, los últimos 98,99 millones de residentes rurales chinos que vivían por debajo del umbral de la pobreza de acuerdo con los estándares actuales salieron de esa situación.
Kuhn, que ha seguido muy de cerca la transformación de China, aseguró que le fascinaba la apuesta del país asiático por un programa de reducción de la pobreza masivo, muy focalizado e individualizado.
"El éxito de China exige que se analice y entienda cuáles son los principios que otros países pueden aplicar", explicó Kuhn, para quien el liderazgo y compromiso de Xi es una de las principales razones del logro.
El segundo principio es la existencia de una estructura de implementación nacional efectiva, continuó el experto, quien precisó que en China "hay una estandarización en la definición de pobreza".
"La estandarización de programas no significa que uno sirva para todos, sino que podría ser una constelación de ideas diferentes que la gente puede probar o elegir de entre una lista de técnicas (para luchar contra la pobreza)", dijo Kuhn.
La respuesta a esas técnicas se notifica después al Gobierno central, donde los funcionarios van elaborando registros para que otras personas que trabajan en el combate a la pobreza puedan conocerlas y utilizarlas, agregó.
Otro factor, a su juicio, es un sistema que puede realmente acabar con la corrupción.
El éxito de la campaña contra la pobreza de China depende de procedimientos estrictos, cuantitativos y transparentes, detalló Kuhn.
"Así pues, la reducción de la pobreza es un logro notable para China en su conjunto. Ha beneficiado a cientos de millones de chinos, pero también aporta una comprensión profunda de cómo funciona todo el sistema chino", aseveró.
Todos los hogares empobrecidos tienen ayuda garantizada, cada aldea cuenta con funcionarios designados para llevar a cabo medidas específicas y los diferentes niveles de secretarios locales del Partido Comunista de China (PCCh) coordinan sus funciones, relató, y agregó que se llevan a cabo evaluaciones de terceros de forma regular y aleatoria para garantizar la precisión y honestidad.
Kuhn y su equipo han pasado tres años realizando el documental "Voces desde la primera línea: la guerra de China contra la pobreza", que repasa el plan contra la pobreza del país asiático.
El documental proporciona una descripción detallada e íntima del combate a la pobreza de China a través de seis casos concretos que destacan la estrategia y los sistemas del país, así como la organización necesaria para ponerlos en práctica.
(Web editor: 吴思萱, 赵健)