Por Yang Hao, Diario del Pueblo
"Además de un total de 1,63 billones de yuanes invertidos por el gobierno central, en los últimos años, las distintas provincias y ciudades del país han asignado 69.300 millones de yuanes para ayudar al Tíbet. De toda esa inversión, se han utilizado más de 590.000 millones de yuanes para la construcción de carreteras y proyectos clave como la autopista Sichuan-Tíbet, el ferrocarril Qinghai-Tíbet, el aeropuerto de Kongga (Lhasa) y la central hidroeléctrica de Zangmu. La promoción del desarrollo económico y social del Tíbet ha creado, en décadas, un milagro humano”. En la mañana del 22 de mayo, la Oficina Etatal de Información dio una conferencia de prensa y el secretario del Comité del Partido de la Región Autónoma del Tíbet, Wu Yingjie, y el presidente de la Región Autónoma del Tíbet, Qizhala, abordaron la evolución del desarrollo social tibetano.
El Tíbet fue una vez la región con mayor incidencia de pobreza, debido a las dificultades de varios tipos para permitir el crecimiento local. Mediante medidas precisas en los últimos años, 628.000 personas registradas como familias pobres y los 74 condados locales han dejado atrás la pobreza. "En 2020, el ingreso disponible per cápita de los residentes rurales fue de 14.598 yuanes, un aumento del 12,7% con respecto al año anterior, manteniendo un crecimiento de dos dígitos durante 18 años consecutivos", dijo Wu Yingjie.
Según Qizhala, durante el período del "XIII Plan Quinquenal", el gobierno central planeó invertir 380.700 millones de yuanes en el Tíbet, habiendo implementado una inversión práctica de 393.700 millones de yuanes. Muchos tibetanos han experimentado un cambio “de lámparas de aceite a lámparas eléctricas, de caminos de tierra a caminos de asfalto”. La inversión durante el período del “XIV Plan Quinquenal” mantendrá un rápido crecimiento basado en el “XIII Plan Quinquenal”, centrado en la construcción de la civilización ecológica, los medios de vida de las personas, la gobernanza social y la construcción de zonas fronterizas.
El Tíbet siempre ha insistido en dar prioridad al desarrollo de la educación. En el Tíbet se ha establecido un sistema educativo moderno que abarca la educación preescolar, la educación básica, la formación profesional, la educación superior, la educación continua y la educación especial, y los derechos e intereses de las personas de todos los grupos étnicos locales están plenamente garantizados.
“Actualmente, hay 3.195 escuelas en el distrito, con más de 880.000 estudiantes. La tasa bruta de matrícula en educación infantil es del 87%, la tasa de matrícula en educación primaria es del 99,9% y la tasa de consolidación de la educación obligatoria es del 95%”. Qizhala dijo que desde el XVIII Congreso Nacional del Partido Comunista de China, el sistema de financiamiento de la educación ha mejorado enormemente. El gobierno central ha implementado la "Política de las Tres Garantías" para los agricultores y pastores tibetanos, con fondos de educación y financiación de más de 18.000 millones de yuanes, subvencionando a 11,02 millones de estudiantes con 40 políticas de financiación diferentes. El sentimiento de obtención de una educación de las personas ha mejorado continuamente.
Desde 2012, los servicios médicos y de salud del Tíbet han mejorado de manera integral, el desarrollo se ha sincronizado con el resto del país y el estado de salud de las personas ha mejorado significativamente. La región ha acelerado la construcción de un sistema de servicios de salud, establido una red de servicios médicos y de salud de cinco niveles que abarque distritos, ciudades, condados y pueblos, y la formación de un sistema de seguridad médica de varios niveles basado en el sistema médico en áreas agrícolas y pastorales, complementado con seguro de enfermedad crítica y asistencia médica. Además, ha mejorado de manera continua los servicios médicos mediante la mejora del sistema de formación y educación de los talentos médicos y las infraestructuras hospitalarias. Para innovar y desarrollar la medicina tibetana, existen actualmente tres centros regionales a nivel nacional de diagnóstico y tratamiento, una universidad médica y 17 empresas productoras de medicamentos.