Restauración de la sección Panjiakou de la Gran Muralla en Tangshan, provincia de Hebei, 18 de junio del 2021. (Foto: Zhao Jie/ China Daily)
Con el objetivo de hacer que las secciones reparadas coincidan con el resto de la Gran Muralla, el equipo sigue el principio de intervención mínima y utiliza métodos y materiales tradicionales.
La sección sumergida se encuentra en medio del embalse, por lo que los ladrillos y otros materiales de construcción deben llevarse a un muelle, cargarse en un bote y descargarse en medio del agua. Cada ladrillo pesa 15 kilogramos. A lo sumo, los trabajadores pueden llevar dos ladrillos cada vez.
"Después de varias rondas de ladrillos, nuestras espaldas comenzaban a ampollarse, y después de trabajar durante varios días, nuestra ropa se estaba desgastando", recuerda un trabajador llamado Liang Wenfu.
Ingenieros y trabajadores viven en medio del embalse.
Una vez a la semana, llega un barco con suministros de alimentos, agua y artículos de uso diario.
Uno de los ingenieros, Cao Huibin, una vez permaneció en el sitio de restauración durante 45 días.
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