EE.UU debe cumplir sus promesas y actuar con cautela

Pueblo en Línea  2021:10:29.15:55

Por Zhong Sheng, Diario del Pueblo

La reunificación completa de China es la tendencia general de la evolución histórica y la voluntad común de todo el pueblo chino. Nadie debe subestimar la determinación, la firmeza y gran capacidad del pueblo chino para defender la soberanía nacional y la integridad territorial.

Recientemente, algunos políticos estadounidenses han promocionado sucesivamente la llamada "participación de Taiwán en el sistema de las Naciones Unidas" y otras cuestiones de organizaciones internacionales, y han ignorado los hechos tratando a China como una amenaza para la paz y la estabilidad regionales. Las palabras y los hechos de EE.UU. violan gravemente el principio de Una China y las disposiciones de los tres comunicados conjuntos sino-estadounidenses, violan sus propios compromisos, violan las normas básicas de las relaciones internacionales, envían una señal seriamente errónea a las "fuerzas independentistas de Taiwán", y empujan las relaciones sino-estadounidenses en la dirección de la confrontación. Debemos advertir a EE.UU que el asunto de Taiwán es puramente un asunto interno de China y China no tolerará ninguna interferencia externa. Nadie debe subestimar la determinación y la gran capacidad del pueblo chino para defender la soberanía nacional y la integridad territorial.

Algunos políticos estadounidenses afirman adherirse a la política de Una China, por un lado, y por otro lado, intercambian conceptos en secreto y confunden al público, intentando desafiar el principio de Una China de manera irrazonable, tratando el problema como si fuese una cuestión de "valores" o una cuestión "pragmática". Aunque Estados Unidos ha diseñado minuciosamente su discurso, no puede cambiar ni ocultar la esencia del problema y los verdaderos motivos de Estados Unidos.

Durante mucho tiempo, las autoridades del Partido Progresista Democrático de Taiwán han clamado por el derecho de "representación de Taiwán" y el "espacio internacional de Taiwán" y otras falacias. La esencia es comprometerse con la "independencia de Taiwán". El argumento de Estados Unidos a favor de Taiwán sobre este tema está enviando una señal seriamente errónea a las fuerzas de la "independencia de Taiwán". La participación de la región de Taiwán en las actividades de las organizaciones internacionales debe manejarse de acuerdo con el principio de Una China. La Resolución 2758 de la Asamblea General resuelve completamente la cuestión de la representación de China en las Naciones Unidas política, legal y procesalmente. El sistema de las Naciones Unidas, los organismos especializados y la Secretaría de las Naciones Unidas deben seguir el principio de Una China y la Resolución 2758 de la Asamblea General de las Naciones Unidas en cualquier asunto relacionado con Taiwán.

Incluyendo a Estados Unidos, 180 países en el mundo han establecido relaciones diplomáticas con China sobre la base de adherirse al principio de Una China. El principio de Una China es el consenso universal de la comunidad internacional y una norma básica de las relaciones internacionales reconocida universalmente que no permite que Estados Unidos la cuestione o malinterprete unilateralmente. Hace cincuenta años, el intento de Estados Unidos de crear "Una China, Un Taiwán" o "Dos Chinas" en las Naciones Unidas quedó frustrado. Hoy, 50 años después, Estados Unidos ha vuelto a exagerar la llamada "participación de Taiwán en el sistema de las Naciones Unidas" y trata de revertir la historia. Se encuentra en el lado opuesto de la gran mayoría de países del mundo y está condenado a fallar nuevamente.

La cuestión de Taiwán concierne a la soberanía e integridad territorial de China y a los intereses fundamentales de China. Es la cuestión más importante y delicada de las relaciones sino-estadounidenses. El principio de Una China es la base política de las relaciones sino-estadounidenses. Estados Unidos tiene clara la posición firme de China sobre el tema de Taiwán y ha asumido compromisos en repetidas ocasiones sobre este tema. En los tres comunicados conjuntos sino-estadounidenses, Estados Unidos reconoce claramente que el gobierno de la República Popular China es el único gobierno legal de China. Dentro de este ámbito, el pueblo estadounidense mantiene relaciones culturales, comerciales y otras relaciones no oficiales con el pueblo de Taiwán. El gobierno de Estados Unidos ha reiterado repetidamente su posición de que "no apoya la membresía de Taiwán en ninguna organización internacional que deba ser un estado soberano".

Recientemente, los funcionarios estadounidenses también han dejado claro que Estados Unidos no tiene intención de cambiar la política de Una China y el status quo en todo el Estrecho de Taiwán. Sin embargo, en realidad, Estados Unidos continúa creando problemas sobre el tema de Taiwán. Desde el fortalecimiento de los intercambios oficiales y los lazos militares entre EE.UU y Taiwán, hasta alentar a los países individuales a causar problemas en el tema de Taiwán, pasando por la exageración frecuente sobre la llamada "participación de Taiwán en el sistema de las Naciones Unidas" y otras cuestiones. Las diversas prácticas violan claramente sus propios compromisos. China ha dado una respuesta firme y necesaria a las palabras y hechos equivocados de Estados Unidos.

En la actualidad, la política estadounidense hacia China ha causado serias dificultades en las relaciones sino-estadounidenses. Volver a encaminar la relación entre los dos países requiere que Estados Unidos tome la decisión correcta y vuelva a una política racional y pragmática sobre China. La cuestión de Taiwán es la máxima prioridad en las relaciones sino-estadounidenses. Si Estados Unidos sigue jugando la "carta de Taiwán" y camina en este sentido hasta el final, no solo creará obstáculos para la flexibilización de las actuales relaciones entre China y Estados Unidos, sino que también representará un enorme riesgo subversivo para las relaciones entre China y Estados Unidos y dañará gravemente la paz y la estabilidad del Estrecho de Taiwán, dañando también los propios intereses de Estados Unidos.

La tendencia del mundo es poderosa, y si la sigues, prosperarás, y si vas en contra de ella, perecerás. La reunificación completa de China es la tendencia general de la evolución histórica y la voluntad común de todos los hijos e hijas chinos. Nos oponemos firmemente a la secesión de la "independencia de Taiwán" y la interferencia externa, y nuestra determinación de salvaguardar la soberanía nacional y la integridad territorial es inquebrantable. Por la presente, instamos a EE.UU a cumplir con sus compromisos sobre la cuestión de Taiwán, actuar con cautela, cumplir estrictamente el principio de Una China y los tres comunicados conjuntos sino-estadounidenses, cumplir con la Resolución 2758 de la Asamblea General de la ONU, dejar de hacer cosas irresponsables y comentarios erróneas, y dejar de ayudar a Taiwán a expandir el llamado "espacio internacional" para no envíar señales equivocadas a las fuerzas de la "independencia de Taiwán". Por último, EE.UU debe tomar acciones prácticas para mantener la base política de las relaciones sino-estadounidenses.