En los últimos años, una carretera a lo largo de los acantilados de la montaña Taihang en la provincia de Shanxi se ha convertido en una atracción para los turistas de todo el país.
Los residentes de la aldea de Shenlongwan tardaron 15 años en construir la carretera de 1.500 metros con herramientas manuales.
Beneficiándose de su clima único, Shenlongwan es conocida por sus nueces y peras, pero el transporte de los productos agrícolas era un gran problema en el pasado. Antes de que se construyera la carretera, los aldeanos tenían que caminar seis horas, desviándose a través de ocho municipios para llegar a la sede del condado, o arriesgando sus vidas escalando un estrecho paso de montaña casi vertical.
Con la finalización de la carretera en 2001, los agricultores de la aldea pueden enviar productos agrícolas para su venta y los turistas llegan a la zona por su atractivo. Los aldeanos están saliendo de la pobreza y abrazando la prosperidad.
La carretera se ha convertido en un canal importante que une el pueblo con el mundo exterior.