CARACAS, 30 jul (Xinhua) -- El Mercado Común del Sur (Mercosur) aúna esfuerzos y voluntades para mejorar las condiciones de vida de la ciudadanía de la región y construir una poderosa zona económica de integración, afirmó hoy la embajadora venezolana ante ese organismo internacional, Isabel Delgado.
En entrevista con la estatal Venezolana de Televisión, Delgado señaló que Mercosur avoca esfuerzos en la construcción de una gran zona económica donde todos los países participen con sus potencialidades y puedan beneficiarse unos de otros.
"Debemos realizar inversiones conjuntas, impulsar la producción y la exportación de bienes y servicios dentro del sur americano y eso figuró entre los objetivos impulsados por Venezuela durante su recién finalizada presidencia pro témpore, y que ahora continuará Argentina", puntualizó la embajadora.
Delgado precisó que actualmente se trabaja en el establecimiento de una zona económica complementaria entre Mercosur, la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA), el grupo energético PetroCaribe y la Comunidad del Caribe (Caricom).
"Nosotros seguimos el rumbo de Hugo Chávez, quien vio muy claro el papel de ese organismo en la construcción de un espacio común económico, financiero, comercial y productivo", indicó la diplomática venezolana.
Asimismo, manifestó que el bloque, integrado por Argentina, Brasil, Paraguay, Uruguay y Venezuela, busca solucionar los problemas de quienes habitan en los países miembros y proyecta crear facilidades como un pasaporte único para viajar libremente en esa zona.
"Las políticas también incluyen el reconocimiento de títulos, de becas académicas y otros similares", explicó.
De igual forma, expresó Delgado, el mecanismo de integración busca emprender acciones colectivas para evitar la migración de niños latinoamericanos hacia Estados Unidos.
En la recién concluida Cumbre Presidencial del Mercosur en Caracas, las naciones miembros firmaron varios comunicados entre ellos el rechazo a los llamados "fondos buitres" que llevarían a Argentina a un eventual default económico y exigieron el cese de los bombardeos por parte del ejército israelí a Palestina.