El primer ministro designado de Irak, Haider al-Abadi, dijo hoy que sus negociaciones con los bloques políticos para formar un nuevo gobierno son constructivas y prometió solucionar todos los problemas pendientes con la región semiautónoma de Kurdistán.
"Las negociaciones con los bloques políticos han sido positivas y constructivas, y esperamos que en los próximos dos días haya una visión unificada sobre el programa de gobierno", dijo Abadi a los reporteros en una conferencia de prensa en Bagdad.
"Deseamos formar un gobierno que incluya a todas las facciones iraquíes", declaró Abadi. Además, pidió a los bloques políticos nominar a sus propios candidatos a los puestos ministeriales.
Respecto a las disputas con la región kurda, Abadi prometió solucionar todos los problemas pendientes con los kurdos y dijo que "estoy obligado por la Constitución a solucionar los problemas con la región de Kurdistán".
Abadi dio la bienvenida a la cooperación más reciente entre las fuerzas de seguridad iraquíes y las fuerzas peshmerga kurdas en varias batallas contra los milicianos del Estado Islámico (EI).
El primer ministro subrayó la necesidad de una mayor coordinación entre el gobierno central y la región del Kurdistán en la lucha contra los milicianos radicales del EI.
Por otro lado, Abadi dio la bienvenida a los voluntarios que se unieron a las fuerzas de seguridad para combatir a los insurgentes sunnitas luego de que éstos ocuparan áreas de las provincias predominantemente sunnitas. Sin embargo, señaló que las actividades de los voluntarios deben estar coordinadas con las fuerzas de seguridad.
Abadi hizo las declaraciones cuando aumentó la tensión sectaria tras el ataque atribuido a milicianos chiitas contra una mezquita sunnita. En el lugar murieron decenas de fieles durante las oraciones del viernes en la provincia de Diyala, oriente de Irak.