Público chino expresa oposición a "Occupy Central" de Hong Kong

Actualizado a las 06/10/2014 - 15:34

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BEIJING, 4 oct (Xinhua) -- El pueblo chino de todas las esferas de la vida ha expresado su denuncia enérgica y oposición a las congregaciones ilegales del movimiento "Occupy Central" en Hong Kong durante estos días.

El movimiento "Occupy Central ha afectado seriamente el orden social en Hong Kong y va en contra del imperio de la ley, señaló el ciudadano de Beijing, Zhao Qing.

"Los organizadores del movimiento sólo tienen el interés de toda la gente de Hong Kong como rehén para su bien personal o el de un grupo de personas, lo que es muy despreciable", dijo Zhao.

El profesor Chen Duanhong, de la Facultad de Leyes de la Universidad de Peking, declaró que los organizadores de "Occupy Central", fuera de algunos propósitos políticos, están usando retórica como "desobediencia social" como un disfraz para instigar a la gente a pisotear la ley.

Victor Zhikai Gao, director de la Asociación Nacional de Estudios Internacionales de China, dijo a Xinhua que él cree que el movimiento actual, incluido el bloqueo ilegal del tránsito y los disturbios graves de la vida diaria de los ciudadanos, esta "evidentemente fuera de los límites de un ejercicio pacífico y legítimo de los derechos de los ciudadanos".

"La democracia debe construirse con base en el imperio de la ley y los derechos democráticos también deben practicñarse a través de medios legales. Lo que los manifestantes de "Occupy Central" están haciendo es tratar de pedir su llamada 'democracia' a través de medidas para debilitar el imperio de la ley, una paradoja ridícula", agregó.

Gao dijo que tiene confianza en el manejo adecuado del gobierno de Hong Kong de la situación.

Las protestas actuales han afectado los negocios y el turismo de la ciudad. Wang Luguo, un empresario de la vecina provincia de Guangdong dijo a Xinhua que las compañías tendrán que dejar de hacer negocios en Hong Kong si las protestas continúan.

"Por nuestras propias ganancias, tenemos que minimizar los daños. Tendremos que dejar de exportar e importar productos vía Hong Kong", indicó Wang, quien ha hecho comercio entre Hong Kong y Guangdong durante años.

"Como economía orientada a la exportación, Hong Kong necesita un ambiente de mercado estable y seguro", agregó. "¿Quién va a pagar el precio de la situación actual? Creo que los residentes ordinarios y negocios de Hong Kong pagarán al final".

Lin Dan, un líder de comunidad de la ciudad sureste china de Fuzhou, declaró que sus vecinos están preocupados por la seguridad en Hong Kong y que han cancelado sus planes de viaje vacacional.

"Hemos estado siguiendo lo que ocurre en Hong Kong en las noticias. Muchos de nosotros piensan que esas cosas no debieron pasar. La gente de Hong Kong debe confiar en el gobierno central", explicó Lin. "Espero que que esos que participan en las protestas entrenen en su sentido común pronto".

Li Zhensheng es un aldeano de Rongzhong en la provicnai de Fujian, sureste de China, donde muchas familias tiene parientes en Hong Kong. "Estamos molestos por las protestas. Hong Kong es una sociedad libre, pero debe tener reglas".

"El movimiento Occupy Central está siendo evidentemente manipulado por ciertas fuerzas políticas" dijo Zhang Nianchi, director del Instituto de Estudios del Asia Oriental de Shanghai. "Creo que la mayoría de la gente de Hong Kong, incluidos los estudiantes jóvenes, no será usada por estas fuerzas. Espero que pueda diferenciar el bien del mal y valore los intereses de toda la sociedad de Hong Kong".

Desde que la política de "Un País, Dos Sistemas", una gran creación de los chinos, se implementó en Hong Kong hace 17 años, la ciudad ha sido uno de los ejes de negocios mejores del mundo, expresó Zhou Hanmin, un asesor político nacional de Shanghai.

"La gente de Hong Kong y su economía serán las primeras en sufrir de la intranquilidad actual. Ningún lugar con enlaces comerciales estrechos con Hong Kong querrá ver eso", señaló.

Para lograr el sufragio universal con tranquilidad, Hong Kong debe trabajar con el gobierno central y confiar en los esfuerzos conjuntos de toda la gente de Hong Kong, apuntó.