Turquía declaró hoy un toque de queda en tres provincias del este y el sureste del país con el fin de dispersar las manifestaciones contra el avance de los militantes del Estado Islámico (EI) hacia la ciudad kurda de Kobane en el norte de Siria, informó la agencia noticiosa privada Dogan.
El toque de queda fue declarado en ciudades de la provincia sudoriental de Mardin y en las provincias orientales de Van y Siirt en Turquía, se indicó en el informe.
Se informó que una persona, Hakan Buksur, murió por heridas de municiones vivas cuando la policía antidisturbios se enfrentó a los manifestantes con balas, cañones de agua y gas lacrimógeno en la ciudad de Varto en la provincia oriental de Mus, se indicó en el informe.
"Los manifestantes deben abandonar las calles, de lo contrario podría haber resultados imprevistos", dijo hoy el ministro del Interior de Turquía, Efkan Ala, en la provincia de Gaziantep. El ministro advirtió que "habrá respuesta a la violencia".
El prokurdo Partido para la Democracia del Pueblo Kurdo (HDP) hizo el lunes un llamado a los kurdos en Turquía para que realicen manifestaciones contra el "intento" del Estado Islámico "por masacrar" a los kurdos sirios en la ciudad de Kobane.
Los manifestantes han estado realizando marchas en toda Turquía desde el lunes por la noche para exhortar al gobierno turco a defender a los kurdos sirios en el país vecino, el cual ha estado registrando durante tres semanas intensos combates entre los militantes del Estado Islámico y los combatientes kurdos.
Según informes, grupos kurdos afiliados al proscrito Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) incendiaron hoy bancos, autos y edificios luego de los informes de que los militantes del EI habían capturado algunas zonas de Kobane durante el fin de semana.
Kobane, también conocida como Ayn al-Arab, ha sido objeto de intensos ataques del EI en las últimas dos semanas. Los combatientes del EI lograron capturar cientos de aldeas kurdas en los alrededores de Kobane, lo que condujo a miles de personas a huir.
El viceprimer ministro turco Yalcin Akodogan pidió el lunes a Estados Unidos intensificar sus ataques aéreos contra los militantes islamistas en el norte de Siria para impedir la caída de Kobane.
"Nuestro gobierno y las instituciones pertinentes destacaron la necesidad de intensificar los bombardeos aéreos de manera más activa y efectiva, en contactos con funcionarios estadounidenses hasta ayer por la noche", dijo Akdogan el lunes en una declaración escrita.
La semana pasada, el Parlamento turco aprobó una moción para autorizar las acciones militares transfronterizas en los vecinos Siria e Irak para combatir a grupos terroristas.
La decisión otorga al gobierno un mandato de un año para enviar a las fuerzas armadas turcas, en caso de ser necesario, a países extranjeros para operaciones e intervenciones transfronterizas y para posicionar a militares extranjeros en Turquía para los mismos fines.
Funcionarios estadounidenses de alto nivel conversarán el jueves en Turquía sobre la posible aportación militar de Ankara a la coalición encabezada por los estadounidenses en contra del Estado Islámico.
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