El gobierno sirio condenó hoy el intenso ataque del Estado Islámico (EI) contra Kobane, ciudad de mayoría kurda en la frontera entre Siria y Turquía, informó la agencia noticiosa oficial SANA.
El gobierno describió las acciones del EI contra Kobane y las aldeas de los alrededores como "brutales masacres" contra la gente de Kobane.
Por otra parte, el primer ministro Wael Halqi enfatizó que Kobane siempre será "el corazón latente de Siria" y resaltó que su gobierno brinda asistencia humanitaria a todas las ciudades sirias, "en especial" a Kobane, " para reforzar la firmeza de su pueblo ante el asedio terrorista" impuesto por el EI, agregó SANA.
El primer ministro añadió que las tropas sirias atraparán a los terroristas en dondequiera que se encuentren en territorio sirio.
La condena, emitida durante una sesión del gabinete, es la primera del gobierno sirio desde que el EI emprendió su ofensiva en gran escala contra Kobane hace tres semanas.
Los enfrentamientos continuaron hoy en los distritos orientales de Kobane y en el borde suroeste de la ciudad, señaló el opositor Observatorio Sirio para los Derechos Humanos.
El observatorio indicó que más de 400 personas, incluyendo a combatientes, han muerto en los enfrentamientos de semanas entre el grupo terrorista EI y los militantes kurdos de las Unidades de Protección Popular (YPG) en Kobane.
El número de muertos incluye a al menos 219 combatientes del EI y 163 de las YPG, aclaró el observatorio.
Según informes, la coalición antiterrorista dirigida por Estados Unidos intensificó sus ataques contra las posiciones del EI en los alrededores de Kobane en las últimas 24 horas, en un intento por ayudar a los golpeados militantes kurdos.
Los militantes kurdos han logrado defender su ciudad y evitar que caiga en manos del EI durante tres semanas consecutivas.
Los ataques anteriores de la coalición no lograron contener el impulso de los combatientes del EI en su ofensiva aplastante contra Kobane.
Kobane, también conocida como Ayn al-Arab, es hogar de más de 400.000 personas y ha atraído a cientos de combatientes kurdos que se han infiltrado por las fronteras iraquí y turca para ayudar a sus compatriotas kurdos, quienes han sufrido uno de los más feroces e implacables ataques de artillería del EI contra el centro de la ciudad.
Desde que el EI inició su ataque el 16 de septiembre, los militantes del EI han capturado más de 300 aldeas en los alrededores de Kobane y han provocado la huida de más de 160.000 personas a la vecina Turquía.