El gobierno español enviará a Irak unos 300 militares para instruir y formar al Ejército iraquí en una misión que durará entre siete y ocho meses, dentro de la aportación a la coalición internacional contra el Estado Islámico que lidera Estados Unidos, anunció hoy el ministro español de Defensa, Pedro Morenés.
El envío de estos soldados españoles tiene aún que pasar por la autorización del Parlamento español, lo que supone que los militares volverán a pisar suelo de Irak después de que hace 10 años el entonces presidente del gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ordenara la retirada de las tropas españolas en ese país.
El ministro Morenés detalló también que los militares españoles, que trabajarán conjuntamente con Italia, se encargarán de entrenar y adiestrar una brigada del Ejército iraquí con el manejo de artefactos explosivos y desminado, así como en operaciones especiales.
Por último, fuentes de Defensa señalan que de los 300 militares que irán a Irak, 69 compondrán la fuerza de protección, otros 60 serán instructores que compondrán tres equipos de adiestramiento y otros 10 se integrarán en el mando y control de Inteligencia, mientras que el resto ejecutarán labores de apoyo al adiestramiento y la seguridad.