WASHINGTON, 9 oct (Xinhua) -- Estados Unidos condenó en términos enérgicos el "despreciable" ataque ocurrido en Saná, capital de Yemen, en el que murieron al menos 47 personas, dijo hoy el Departamento de Estado.
"El pueblo yemení ha vivido con una violencia sin sentido durante demasiado tiempo y el reciente aumento de las hostilidades contra civiles inocentes sólo socava los avances que Yemen ha realizado para lograr reformas significativas desde 2011", indicó en una declaración la vocera del Departamento de Estado, Jen Psaki.
Un ataque suicida con bomba ocurrió hoy durante una manifestación de chiitas houthi en Saná, lo que provocó la muerte de al menos 47 personas, incluyendo mujeres y niños. Al Qaeda en la Península Arábiga (AQPA) se adjudicó la responsabilidad por el ataque.
El ataque perpetrado en el centro de Saná se produjo horas después de que el recién nombrado primer ministro Ahmed Awad bin Mubarak dimitió del cargo en medio de amenazas de protestas masivas.
El presidente de Yemen, Abd-Rabbu Mansour Hadi, estuvo de acuerdo en aceptar la renuncia.
"Estamos con la comunidad internacional en el apoyo al presidente Hadi, como líder de Yemen elegido de manera legítima, en sus esfuerzos encaminados a dirigir a ese país durante este frágil periodo", dijo Psaki.
Estados Unidos también condenó los ataques perpetrados hoy contra las fuerzas de seguridad yemeníes en Hadramawt, así como los ocurridos el miércoles en Bayda, cuyo propósito es socavar la estabilidad de Yemen, señaló la vocera.
"Pedimos a todos los yemeníes abstenerse de la violencia, regresar a una expresión pacífica de las inconformidades y trabajar de manera pacífica en el proceso de transición política de ese país para hacer oír sus voces", añadió Psaki.