BEIJING, 2 nov (Xinhua) -- El jefe del programa de la sonda lunar de China ha pedido un análisis minucioso de los datos recogidos por el orbitador lunar de prueba, que regresó ayer sábado a la Tierra, para acelerar el trabajo relacionado con el Chang'e-5, el proyecto estrella de la misión lunar de 2017.
Con el aterrizaje exitoso del orbitador lunar de prueba realizado en las primeras horas del sábado en el norte del país tras un vuelo de ocho días, China se convirtió en el tercer país que logra completar un viaje de ida y vuelta a la Luna, después de la antigua Unión Soviética y Estados Unidos.
"La misión se llevó a cabo con vuelo estable y precisión en el momento del lanzamiento, la entrada en órbita y la recuperación y se lograron todos los objetivos previamente programados", señaló hoy domingo el también director de la Administración Estatal de Ciencia, Tecnología e Industria para la Defensa Nacional, Xu Dazhe, en una ceremonia de recibimiento del orbitador.
Según Xu, la misión marcó un "avance decisivo" en la tercera y última etapa del programa lunar (vuelo orbital, aterrizaje y regreso) y mejoró la comprensión de los mecanismos de reentrada a alta velocidad, el desarrollo de nuevos materiales y el diseño de equipos espaciales innovadores.
La nave Chang'e-5 recogerá muestras de la superficie lunar en una misión planeada para 2017.