El Gobierno brasileño espera que el flujo comercial con Estados Unidos mejore en los próximos dos años, principalmente en los manufacturados, gracias a los acuerdos que la presidenta Dilma Rousseff debe firmar en su próxima visita al país estadounidense a finales de este mes, informó hoy el ministro de Desarrollo, Industria y Comercio Exterior, Armando Monteiro.
En un seminario en Río de Janeiro, Monteiro dijo que el Plan Nacional de la Exportación, que debe ser presentado este mes, también ayudará a aumentar las ventas externas a Estados Unidos, y dijo que los acuerdos que debe firmar Rousseff le dan una "una dimensión mucho mayor" a la visita de la mandataria.
"Lo importante es que los dos gobiernos reafirmen que estas áreas son importantes en el plano de las relaciones bilaterales. Esta señal la tendremos de forma muy clara", dijo el ministro de Comercio Exterior brasileño.
Según él, los sectores beneficiados serán los de cerámica, textil y máquinas y equipamientos. Monteiro agregó que Estados Unidos son una prioridad para el comercio exterior brasileño, con una previsión de aumentar las ventas en 3,5 por ciento.
Sobre el Plan Nacional de Exportación, que será lanzado el 23 de junio, el ministro dijo que todavía faltan algunos detalles para que sea finalizado.
"Estamos negociando cosas más sensibles al ajuste (fiscal). Estamos pidiendo un refuerzo por entender que es un instrumento muy importante para la exportación de manufacturados y servicios", agregó.
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