ESPECIAL: Crisis en Grecia evoca declive económico de Argentina

Actualizado a las 01/07/2015 - 13:19

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BUENOS AIRES, 30 jun (Xinhua) -- La crisis económica y financiera que enfrenta Grecia evoca la situación en Argentina, donde hace 12 años se vivió un contexto similar con bancos cerrados, límites a la extracción de dinero por cajeros automáticos y preocupación por una deuda impagada.

Ante los acontecimientos en Atenas, los medios en Argentina se han encargado de realizar un seguimiento especial del tema, con comparaciones, antecedentes y advertencias, lo cual se potenció luego de un artículo del economista Santiago Carbó que difundió en España el diario "El País", según el cual "Grecia es una Argentina dentro de Europa".

Por decreto gubernamental, los bancos y la Bolsa de Valores de Atenas permanecen cerrados hasta el próximo 6 de julio, para evitar la fuga de capitales, ante lo cual los griegos hacen largas filas en los cajeros automáticos para retirar efectivo un límite de 60 euros (66,8 dólares) diarios.

Ello ocurrió también en Argentina a finales dw 2001, cuando se dispusieron sucesivos "feriados bancarios", que, en concreto, era una medida oficial para mantener las entidades sin operaciones para evitar que los depositantes retiraran sus ahorros.

"El panorama es, sin duda, sombrío y recuerda al 2001 argentino cuando el gobierno no pudo mantener la 'convertibilidad', un mecanismo monetario por el que prometían mantener el precio del peso al mismo nivel que el del dólar", comparó en Buenos Aires la revista especializada Fortuna.

La publicación bonaerense recordó que "el gobierno de Fernando de la Rúa (1999-2001) impuso el "corralito" a través de un decreto que anunció que cuando se abrieran los bancos, se limitara a los ciudadanos retirar de hasta 250 pesos/dólares a la semana de los bancos, aunque sin límite para pagar en cheques, lo cual generó protestas entre la población.

"Los saqueos en los supermercados no tardaron en llegar. Sucede que millones de familias se vieron sin acceso a sus ahorros lo que trajo aparejado un enorme estallido social con la posterior renuncia del presidente", evocó el economista.

Tras la caída de De la Rúa, el peronista Adolfo Rodríguez Saa asumió un mandato de solo una semana y dejó a Argentina en una cesación de pagos ("default") de 102.000 millones de dólares.

Ante la salida de Rodríguez Saá, asumió otro presidente, Eduardo Duhalde, quien dispuso una ley de emergencia económica que terminó con la convertibilidad de un peso igual a un dólar, se "pesificaron" los créditos y la moneda estadounidense se devaluó 30 por ciento.

"La historia, sin dudas, parece una profecía y amenaza con repetirse en la zona del euro con su primer eslabón, Grecia", alertó Fortuna.

En declaraciones a la radiodifusora Del Plata, el ex ministro de Economía de Duhalde, Jorge Remes Lenicov (2002), sostuvo que "lo de Grecia es muy parecido al gobierno de De la Rúa".

En 1999 "decían que había que flexibilizar el mercado laboral y mantener la convertibilidad, mientras que nosotros decíamos que había que mantener el modelo y renegociar la deuda, en esos años la economía cayó 20 por ciento con una desocupación del mismo orden. Grecia está haciendo lo mismo que hacía Argentina y lleva una caída del producto interno bruto del 25 por ciento", indicó.

Por su parte, en declaraciones a la radiodifusora América, el ex secretario de Finanzas, Guillermo Nielsen, consideró que la crisis de Grecia estaba "anunciada".

"Lamentablemente es una agonía que ya lleva seis años. Hubo una serie de errores iniciales muy fuertes, pero básicamente no se hizo la reestructuración de la deuda con la profundidad en que se tendría que haber hecho en su momento. Se decidió hacer una quita más chica, pero no es suficiente", sostuvo.

En el caso argentino, la quita fue de 65 por ciento, en dos operaciones, una en 2005, otra en 2010, que terminó con la aceptación del 93 por ciento de los acreedores.

"Argentina y Grecia, hermanos en el 'corralito' y el 'default'", informó el canal de televisión Todo Noticias, que utilizó la palabra "corralito" en alusión a las restricciones para que los ahorristas retiren su dinero de los bancos.

"Grecia está al borde del que puede ser un 'default' más grave que el argentino de 2002, con un corralito que a su vez puede provocar un efecto dominó sobre toda la eurozona", alertó el analista Alejandro Bianchi.

El domingo próximo, los griegos tendrán un referendo con respecto a la propuesta de los acreedores sobre reformas a cambio de efectivo, lo cual generó una oleada de dramáticos acontecimientos.

En unas horas, el Eurogrupo decidió que el rescate ampliado que mantuvo a Grecia a flote desde 2010 expire este martes, como se acordó en febrero pasado, en tanto el Banco Central Europeo anunció el congelamiento de fondos de emergencia adicionales para los bancos griegos.

El primer ministro griego Alexis Tsipras culpó de nuevo del fracaso de las negociaciones sobre un acuerdo a los prestamistas y acusó a los interlocutores de falta de disposición para encontrar elementos en común, pero expresó su confianza en que las conversaciones serán reanudadas y Grecia estará en una posición más firme después del domingo.

Ante este panorama, el gobierno argentino ha expresado su solidaridad con el pueblo y gobierno de Grecia, a través del jefe del Gabinete de Ministros, Aníbal Fernández, quien, además, vinculó lo que ocurre en el país europeo al accionar de fondos especulativos de inversión.

"Nosotros vemos en esto la sombra, después de semejante desaguisado, de los (fondos) buitres, especialmente de Elliot, que desde diciembre de 2013 viene comprando papeles de Grecia, esperando que tropiece o se arrodille para comenzar a comerle todo lo que está alrededor como sucede con cada uno de los países que han tenido situaciones parecidas", señaló.

"Argentina ya lo ha vivido y estamos viendo en este momento y están esperando que a Grecia le vaya exactamente de la misma manera para empezar a rapiñarlos como han hecho con todo el mundo", agregó Aníbal Fernández.