Doctores, enfermeras y miembros del personal de un comité local de la Cruz Roja ofrecen un tributo en silencio a Ye Xue, quien donó sus órganos saludables, un hígado y un par de riñones luego de su muerte el 4 de septiembre de 2015.
Más de 6.000 órganos fueron donados por más de 2.000 donadores en los primeros nueve meses de 2015, dijo Huang Jiefu, ex viceministro de salud y actual director del Comité Nacional de Donación de Órganos Humanos y Trasplantes.
Huang espera que habrá más de 2.500 donadores de órganos en China este año, y más de 10.000 trasplantes. Comparados con las 8.000 operaciones en los años anteriores, los trasplantes de este año serán la mayor cantidad.
China, que hasta enero de 2015 utilizaba los órganos de los prisioneros ejecutados, comenzó un programa de prueba de donación voluntaria en 2010. Antes de dicho programa, el país dependía casi totalmente de los prisioneros ejecutados como fuente de órganos para trasplantes, ya que China no tenía un sistema de donación voluntaria, según Huang.
Un total de 169 hospitales están calificados para realizar trasplantes con menos de 300 doctores que tienen experiencia en dichas operaciones. Huang dijo que sólo una docena de hospitales, entre los autorizados, están calificados para realizar trasplantes de riñones y menos de 20 hospitales están calificados para realizar trasplantes de corazón y hay menos de 20 cirujanos calificados para ello.
Para promover la donación de órganos, China busca incrementar el número de hospitales autorizados a más de 300 y entrenar a más de 500 doctores.
China prohibió el uso de los órganos de los prisioneros ejecutados en enero de 2015, convirtiendo a las donaciones voluntarias en la única fuente legítima de trasplantes de órganos. La medida fue bien recibida por la Organización Mundial de la Salud y la comunidad mundial de trasplantes.