Brasil buscará reequilibrio fiscal y mayores inversiones en 2016, afirma Rousseff

Actualizado a las 08/01/2016 - 09:35

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La presidenta brasileña Dilma Rousseff afirmó este jueves que el gobierno buscará en 2016 la aprobación de las medidas fiscales en el Congreso, con el fin de alcanzar un reequilibrio y crear las condiciones para la atracción de inversiones en infraestructura.

Las acciones, afirmó, estarán dirigidas a revertir la crisis económica y conseguir un desempeño mejor que en 2015, cuando la economía brasileña entró en una fuerte recesión.

"La prioridad es el reequilibrio fiscal del país. Perdimos ingresos de forma sistemática por la caída de la recaudación, incluso con los grandes recortes de gastos que hicimos no conseguimos equilibrar las cuentas", admitió.

La presidenta también dijo que el gobierno "hará de todo" para garantizar un superávit fiscal primario de 0,5 por ciento del producto interno bruto (PIB), según lo previsto en el presupuesto.

"La estabilidad macroeconómica es un componente fundamental del reequilibrio fiscal y de la retomada del crecimiento", subrayó.

"Abordar el reequilibrio fiscal también tiene impacto en la mejora de las condiciones de inflación. Nuestro objetivo es que la inflación vuelva pronto al centro de la meta oficial (de 4,5 por ciento anual) y el mecanismo es el reequilibrio fiscal", explicó.

Además de garantizar el reequilibrio macroeconómico, el gobierno impulsará reformas tributarias y en el sistema de pensiones y ofrecerá incentivos para que las empresas inviertan en aeropuertos, puertos, carreteras, ferrocarriles y en el sistema eléctrico.

Brasil enfrenta una recesión económica y terminó 2015 con una contracción económica de 3,7 por ciento, una inflación de 10,7 por ciento y un déficit récord en sus cuentas públicas.

Sobre las medidas que serán abordadas en el Congreso, Rousseff hizo hincapié en los textos que tratan de la Contribución Provisional sobre las Transacciones Financieras (CPMF, según la sigla en portugués) y la Desvinculación de Ingresos de la Unión (DRU), como alternativas para ayudar en la recuperación económica.

La presidenta señaló que la aprobación de la Contribución Provisional sobre Transacciones Financieras (CPMF, por sus siglas en portugés y conocida como impuesto al cheque) ayudará al gobierno a recuperar los ingresos.

"No es sólo el reequilibrio fiscal, sino también una cuestión de salud pública. Aprobar la CPMF puede ayudar a resolver el problema de la salud pública en el país. Está claro que los estados y municipios requieren esta característica ", enfatizó.

Rousseff anunció también que el gobierno enviará al Congreso una nueva reforma previsión social, con el objetivo de resolver el déficit del sistema de seguridad social.

El gobierno pretende elevar la edad mínima jubilatoria ante el aumento de la expectativa de vida en el país.

"La base (para la reforma) es el diálogo para escuchar a todos los segmentos, pero debemos tener claro que estamos ante un problema real ", afirmó.

La mandataria consideró que la oposición debe apoyar las medidas de interés para Brasil, por encima de cuestiones partidarias.