El canciller de Austria, Werner Faymann, pidió un "plan B" para abordar la actual crisis de refugiados a fin de limitar el número de refugiados que entran a Austria y Europa y pidió principalmente enviar de regreso a los migrantes económicos.
En una entrevista con el diario Krone que se publicará el martes, Faymann reiteró su postura de que Europa debe trabajar unida para resolver los problemas actuales y de que Austria debe cooperar aún más con Alemania, pero ahora también declaró que se deben realizar más repatriaciones.
La magnitud de la crisis ha conducido al canciller a pedir una política más dura, junto con Alemania, para enviar de regreso a sus países de origen a los migrantes económicos y así reducir el número de migrantes en general.
Faymann dijo que la separación entre los migrantes económicos y los que huyen de conflictos reales se realizaría mejor en la frontera exterior de la Unión Europea.
El canciller reconoció que Austria también tomará medidas en sus propias fronteras y enfatizó que en el caso de los migrantes económicos "debemos decir no. Necesitamos espacios para los refugiados de guerra".
Para este propósito, Faymann pidió al Ministerio del Interior ofrecer opciones para distinguir entre los dos tipos de migrantes y dijo que se debe diseñar un plan coordinado entre el Ministerio del Interior, el Ministerio de Defensa y su departamento.
El canciller señaló que la afluencia de refugiados pronto subirá de nuevo, pero fue evasivo en relación con el cierre general de la frontera y señaló que el asunto es más complicado.