Un cachorro de panda gigante murió el martes en la mañana cinco días después de nacer en un centro de crianza en Chengdu, suroeste de China, confirmó hoy a Xinhua el centro.
El cachorro pereció a las 5:00 horas del martes cuando chilló repentinamente y cayó del regazo de su madre, quien acababa de amamantarlo. El cachorro fue sacado de inmediato por el personal, el cual descubrió que ya no respiraba.
Un veterinario confirmó su muerte y la autopsia mostró que no había ninguna anormalidad en sus órganos.
El cachorro era hijo de "Aibang" de nueve años de edad y nació el viernes, fue el primer panda nacido este año. Todo el tiempo fue atendido por su madre.
El personal de la Base de Investigación Chengdu de Crianza del Panda Gigante había estado observando al cachorro las 24 horas del día y dijo que no presentó anormalidades en su temperatura, heces ni dieta en los primeros cuatro días de vida.
En ese periodo, el cachorro creció de 145 a 172 gramos.
El centro de crianza dijo que la muerte repentina es muy extraña entre los pandas criados en cautiverio y que tiene muchas similitudes con el síndrome de muerte repentina de infantes entre los humanos.
Los órganos del cachorro fueron enviados a un laboratorio para que sean examinados mientras que el centro de crianza está confortando a la madre.
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