LIMA, 8 jul (Xinhua) -- El gobierno del presidente electo de Perú, Pablo Kuczynski, está dispuesto al diálogo para resolver los problemas que enfrenta la empresa metalúrgica estadounidense Doe Run y los trabajadores de este sector, afirmó hoy el primer vicepresidente electo Martín Vizcarra.
Vizcarra aclaró que el nuevo gobierno, que asumirá el 28 de julio, quiere dar solución a la incertidumbre que existe entre los trabajadores metalúrgicos de la ciudad minera de La Oroya desde hace cinco años.
Según Vizcarra, una de las demandas del presidente electo es que el próximo Congreso de este país, integrado por una mayoría opositora, apruebe un marco legal para ampliar los plazos de liquidación establecidos que vencen el 27 de agosto.
Las declaraciones del brazo derecho de Kuczynski, quien convocó a una marcha hacia el Congreso, responden a las críticas del partido fujimorista Fuerza Popular (FP), que contará con 73 legisladores de un total de 130 integrantes en el parlamento peruano, a partir del 28 de julio.
El fujimorismo criticó la marcha convocada por Kuczynski en La Oroya durante una reunión con los trabajadores de este centro metalúrgico, buscando la ampliación de plazos para solución la disputa entre Doe Run, el Estado peruano y los trabajadores.
La Oroya, ubicada en la región centroandina de Junin, a 174 kilómetros al este de Lima, es un centro industrial que alberga a alrededor de 2.400 trabajadores, y cuenta con una infraestructura metalúrgica importante que Kuczynski quiere recuperar.
El pasado miércoles, el presidente electo, quien gobernará este país durante el periodo 2016-2021, visitó este centro industrial para reunirse con los trabajadores y lograr una prórroga para evitar la liquidación de este emporio metalúrgico.