Presidente de AGNU introduce código de ética y juramento para sucesores

Actualizado a las 14/09/2016 - 14:33

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Mogens Lykketoft, presidente de la 70° sesión de la Asamblea General de la ONU (AGNU), anunció que debido al escándalo de sobornos surgido alrededor de uno de sus predecesores, el organismo de 193 naciones aprobó hoy un Código de Etica para el cargo e introdujo un juramento para la toma de posesión de sus sucesores.

Minutos antes de su última reunión formal con los reporteros como presidente de la AGNU, la asamblea aprobó la medida como parte de una acción para "revitalizar" al organismo de la ONU.

Lykketoft será sustituido más tarde por el embajador Peter Thomson de Fiyi como presidente de la sesión número 71 de la AGNU y será el primero en pronunciar el juramento de 100 palabras.

Lykketoft, un político danés que no estuvo involucrado en el escándalo, ha trabajado arduamente para asegurarse de que no habrá nuevos abusos en el cargo.

El embajador John Ashe de Antigua y Barbuda, de 61 años de edad, fue encontrado muerto en junio en su casa de Dobbs Ferry en el estado de Nueva York luego de un accidente ocurrido al levantar una barra de pesas que le cayó encima durante una sesión de ejercicios, señalaron autoridades estadounidenses.

Ashe, presidente de la 68° sesión de la Asamblea General de septiembre de 2013 a septiembre de 2014, fue acusado por fiscales federales de aceptar más de un millón de dólares en sobornos y de convertir su puesto en una "plataforma para el lucro". Ashe se declaró inocente.

En lugar de "ofrecer una evaluación del año transcurrido", dijo Lykketoft, "quiero informarles en particular que acabamos de adoptar hace unos minutos una resolución de revitalización y que lo que tenemos ahora es un nuevo Código de Conducta y un juramento para el próximo presidente y para toda la transparencia por la que hemos trabajado en el tema del presidente de la Asamblea General".

Lykketoft también dijo que envió una carta al presidente del Consejo de Seguridad y al presidente entrante, con copia para los Estados miembros, sobre la transparencia en la elección del próximo secretario general.

El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, se retirará el 31 de diciembre después de cumplir dos periodos de cinco años. Ha habido quejas en el sentido de que el proceso de selección no es suficientemente transparente.

"Creo que este nuevo estándar debe ser visto como un nivel, no como un tope, que debe mantenerse durante todo el proceso de selección", dijo. "Esta es también la razón por la cual he recibido algunas declaraciones críticas sobre la presunta falta de transparencia en lo que el Consejo de Seguridad hace en sus votaciones".

"Esto no es un gran problema porque ustedes (los miembros de los medios) pueden enterarse con rapidez del resultado de las votaciones para que todos nos enteremos", dijo. "Pero creo que concordaría más con la transparencia por la que hemos luchado en la Asamblea General si también hubiera habido de manera formal un proceso transparente en el Consejo de Seguridad".

"Más adelante podría valer la pena considerar cómo establecer este ejercicio o explorar la manera de asegurarnos de que las evaluaciones de los miembros sobre los candidatos puedan ser incluidas en el proceso de selección en el consejo", dijo Lykketoft.

La Carta de la ONU señala que sólo los 15 miembros del Consejo de Seguridad deben recomendar al candidato a la Asamblea General.

Este año, Lykketoft instituyó un programa de "debates" en la asamblea en los que los candidatos presentados por sus gobiernos son entrevistados por los miembros de la asamblea.

Lykketoft también dijo que Christiana Figueres, una diplomática costarricense, dejó la contienda, por lo que quedan nueve candidatos.

El Código de Conducta de cerca de 450 palabras señala que al consultar con los Estados miembros, el presidente no debe recibir ni aceptar instrucciones "de ningún individuo, gobierno, organización internacional o grupo y debe evitar toda situación en la que exista un conflicto con sus intereses personales o privados".

El código también busca que el presidente de la asamblea asegure "la mayor transparencia posible en la utilización de propiedades, instalaciones, servicios y recursos disponibles para la realización de las funciones del cargo y asegurarse de que que sólo sean utilizados para las actividades oficiales de la presidencia y no para otros propósitos".