BEIJING, 27 oct (Xinhua) -- Beijing está transformando sus calderas de carbón, que generan unas 7.000 toneladas de vapor por hora, con energías limpias para cambiar el aire contaminado de la ciudad.
Al final de este año, las instalaciones ecológicas ayudarán a reducir el uso en cerca de dos millones de toneladas de carbón, lo que significa una disminución anual de unas 30.000 toneladas de polvo, 16.000 toneladas de dióxido sulfúrico y 5.000 toneladas de óxido de nitrógeno, según el Buró Municipal de Protección Ambiental de Beijing.
La capital china lanzó en 1998 un "proyecto de energía ecológica" para transformar las calderas de carbón. A finales de 2015, Beijing ha eliminado gradualmente calderas que generaban más de 60.000 toneladas de vapor por hora, de acuerdo con el buró.
La densidad de las partículas finas (PM2,5) en Beijing bajó un 10,1 por ciento interanual en los primeros nueve meses del año, informó la semana pasada el órgano regulador local de medio ambiente.
El promedio de la lectura de las PM2,5 durante el periodo se situó en 62 microgramos por metro cúbico. En 2015, el nivel fue 80,6 microgramos, frente a los 95,7 microgramos registrados en 2012.