El gobierno chino se propone reproducir el éxito de las zonas de libre comercio de prueba (ZLC) por todo el país.
El Consejo de Estado, el gabinete del país, ha publicado una circular que muestra las fases de la iniciativa, por la que se aplicarán en todo el país 19 nuevas disposiciones.
Uno de los éxitos de las ZLC ha sido la introducción de una lista negativa que especifica qué sectores de inversión están vetados a los inversores extranjeros y permite que las industrias no incluidas sigan las mismas reglas de inversión que las compañías nacionales.
Otros artículos abordan la simplificación de procesos comerciales y reglamentos aduaneros.
Las ZLC son una forma de ensayar nuevas medidas políticas como la liberalización de los tipos de interés y la reducción de las restricciones a la inversión para integrar mejor la economía china con las prácticas internacionales.
La expansión de estas medidas llega más de tres años después de la puesta en marcha de la primera ZLC de China en Shanghai.
En 2014 se permitió a la municipalidad de Tianjin y las provincias de Fujian y Guangdong que creasen el segundo grupo de ZLC. Otras siete se sumaron a la lista en el país en agosto de este año.