Por René Quenallata Paredes
LA PAZ, 18 nov (Xinhua) -- Los desechos que genere el Centro de Investigación Nuclear de la ciudad boliviana de El Alto serán mínimos y trasladados a Rusia, tal como se establece en el contrato, dijo hoy el viceministro de Energías Alternativas, Joaquín Rodríguez.
"Está contemplado que los residuos o desechos que deje el reactor nuclear serán llevados a Rusia, aunque su volumen será prácticamente nulo, ya que se acumularán solo dos kilos por año (...) ningún residuo va a quedarse aquí en Bolivia", afirmó el viceministro a periodistas en La Paz.
La empresa rusa Rosatom calculó que el primer traslado de desechos hacia Rusia se realizará hasta dentro de 15 o 20 años.
De acuerdo con el presidente del Centro Regional de Rosatom para América Latina, Sergei Krivolapov, en este Centro no habrá emisiones radiactivas que afecten a la población, y mencionó que más bien este proyecto generará beneficios en el tema de alimentos, salud, acceso a nuevos conocimientos y empleo.
Los gobiernos de Bolivia y Rusia firmaron en marzo pasado un acuerdo para la construcción de un centro de investigación en tecnología nuclear con fines pacíficos, el cual se perfila a convertirse en el mayor de su tipo en América Latina.
El proyecto contará con un centro para el diagnóstico precoz de cáncer e investigación de enfermedades coronarias, una planta multipropósito de seguridad e inocuidad alimentaria y un reactor nuclear de investigación científica con fines pacíficos, componentes considerados básicos para la nación.
El centro de investigación nuclear será construido en un terreno de 15 hectáreas, a 4.000 metros de altura.
Un modelo gráfico muestra tres modernos edificios rodeados de jardines, dos canchas de tenis, una piscina, un centro de congresos y hasta un hotel.
La planta, cuya construcción demorará cuatro años, tendrá un costo total de 300 millones de dólares, contará con tecnología rusa y estará situada en la ciudad de El Alto. Se prevé que entre en funcionamiento en un plazo de cuatro años.
La construcción del centro forma parte del plan civil de energía atómica con fines pacíficos anunciado por el gobierno boliviano en 2014, el cual cuenta con el respaldo del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) de la Organización de las Naciones Unidas.
El plan nuclear del gobierno boliviano apunta a mejorar la salud y la seguridad alimentaria e impulsar la industria tecnológica.
Hasta ahora son tres los países de América Latina que cuentan con plantas nucleares energéticas, Argentina, Brasil y México.
DESCARTAN DESECHOS
Por su parte, el director del Instituto Boliviano de Ciencia y Tecnología Nuclear (IBTEN), Lucio Ronald Berdeja, aseguró en contacto telefónico con Xinhua que "en Bolivia no existen desechos nucleares y tampoco van a existir" con la puesta en marcha del proyecto nuclear que encara el gobierno.
Según Berdeja, el único desecho se registrará cuando se utilice el proyecto en actividades de medicina nuclear, pero al colocar esos materiales en un despacho cerrado se convertirá en "basura convencional", porque su irradiación en muy baja.
No obstante, admitió que el reactor de investigación nuclear generará "muy pocos" desechos nucleares al cabo de su existencia, en unos 20 años, pero esos residuos serán llevados a Rusia, de acuerdo con el contrato suscrito con Rosatom, empresa encargada del proyecto.
En ese sentido, aseveró que el proyecto nuclear boliviano no será un peligro para el medioambiente del país, porque también existen manuales de seguridad, vigentes hace décadas, que fiscalizan el uso de esa tecnología.
ESTUDIOS 2017
Sobre el avance del proyecto nuclear, el viceministro de Energías Alternativas precisó este viernes que los estudios preliminares para viabilizar la construcción del Reactor de Investigación Nuclear en la ciudad de El Alto concluirán en marzo de 2017.
El funcionario explicó que para comenzar con la construcción física del reactor se requieren estudios preliminares que establezcan la línea base para aplicar tecnología nuclear en el país.
"Los estudios están contemplados que deberíamos tenerlos ya terminados en marzo de 2017, son siete meses, se han firmado los contratos en agosto y más o menos a fines de febrero o principios de marzo deberíamos tener estos estudios. Son los estudios que sirven de base para hacer el diseño y la construcción de lo que es el centro", manifestó.
De acuerdo con el IBTEN, mientras se realizan los estudios se definen de manera paralela aspectos técnicos del reactor, como los referentes a los equipos, plazos y responsabilidades con la empresa rusa Rosatom, encargada del proyecto.
El viceministro Rodríguez precisó que se deben cumplir varias etapas para hacer realidad el centro nuclear, como en cualquier proyecto.
Consideró que para Bolivia es una construcción "bastante importante", por lo tanto debe cumplir con normativa internacional que está establecida en el OIEA.
Agregó que Bolivia es el último país de la región en emprender un proyecto de este tipo, que coadyuvará en el control de calidad de los alimentos, en la detección temprana del cáncer y permitirá además tener otros mercados.