El Buró Nacional de Estadísticas (BNE) de China está trabajando en un índice que medirá la floreciente "nueva economía" del país, afirmó hoy jueves un funcionario de la entidad.
El índice evaluará la nueva economía en términos de los conocimientos, la vitalidad económica, la innovación, la digitalización, la transformación y la actualización, así como los logros, dijo Xian Zude, estadístico jefe del BNE, durante un foro.
La nueva economía ha registrado un rápido desarrollo de China en los últimos años, con la aceleración de las industrias de tecnología punta, la prosperidad de los negocios en internet, el florecimiento de las ventas al por menor en línea y la multiplicación de nuevos productos y servicios, enfatizó Xian.
Sin embargo, el país carece de estándares estadísticos y de un indicador unificado para reflejar el desarrollo de esta nueva economía.
Con el objetivo de entender mejor el estatus de la nueva economía, el BNE empezó a recoger datos sobre las nuevas industrias, las nuevas formas de actividades comerciales y los nuevos modelos de comercio en mayo, indicó Xian.
Un censo agrícola a nivel nacional en curso también incluye información sobre cómo los agricultores utilizan internet y realizan transacciones en línea, explicó.
La economía colaborativa, como los negocios de vehículo compartido y alquiler de habitaciones, quedará excluida del índice de la nueva economía debido a la dificultad de su medición cuantitativa, agregó.
A medida de que la economía de China se desaceleraba por las débiles exportaciones, las tibias inversiones y el exceso de capacidad industrial, las autoridades han ido intentando promover nuevos motores de crecimiento a través de estimular la innovación y la actualización estructural.
El producto interno bruto (PIB) de China creció un 6,7 por ciento interanual en el tercer trimestre, manteniéndose así estable con respecto a los dos trimestres anteriores, lo cual, no obstante, todavía supone el crecimiento más lento desde la crisis financiera global.