El presidente de México, Enrique Peña Nieto, firmó hoy dos decretos para incentivar las inversiones, los cuales incluyen deducciones inmediatas de impuestos a la pequeña y mediana empresa (pyme) y estímulos para la repatriación de capitales.
México es una nación confiable para invertir y generar empleo de calidad pese a la incertidumbre económica internacional, aseguró el mandatario mexicano durante la firma celebrada en la residencia oficial de Los Pinos, donde convocó a los empresarios a seguir invirtiendo y aprovechar las ventajas de México.
Peña Nieto insistió que las ventajas competitivas de México van mucho más allá de cualquier coyuntura, circunstancia o el momento que eventualmente se este enfrentando.
También se dijo dispuesto a asumir medidas difíciles, como el aumento al precio de las gasolinas del pasado 1 de enero de hasta 20 por ciento, pues consideró que "decisiones como éstas, dan certeza y reafirman la solidez de nuestra economía".
Peña Nieto explicó que con la firma de los decretos se busca incentivar la inversión de la pyme y promover la producción, el empleo y el fortalecimiento económico.
"Significa que las pequeñas empresas que compren maquinaria y equipo podrán pagar menos impuestos por estas inversiones", declaró al agregar que podrán acceder a este beneficio los contribuyentes que obtengan ingresos hasta por 100 millones de pesos (4.644 millones de dólares).
En cuanto al segundo decreto firmado, el presidente dijo que para estimular el regreso de capitales no declarados que se encuentran en el extranjero se ofrecerá un impuesto preferente por seis meses.
La medida establece una tasa de repatriación del 8 por ciento a los residentes en el país que mantienen capitales en el exterior, muy por debajo de las vigentes del 30 y 35 por ciento para personas morales y personas físicas, respectivamente, según el comunicado difundido por la Presidencia.
Los capitales que retornen al país podrán gozar del impuesto preferencial si son invertidos en activos fijos, como terrenos y construcciones, así como en proyectos de investigación y desarrollo, y permanecen al menos dos años en México.