BUENOS AIRES, 2 feb (Xinhua) -- Un total de 126 brigadistas argentinos bajo la coordinación de la Comisión de Cascos Blancos (CCB) de la Cancillería argentina colabora con Chile ante los incendios forestales que afectan a ese país sudamericano.
A través de un comunicado, la CCB indicó que el aporte argentino está integrado por los esfuerzos de las provincias de Córdoba, Santa Fe y San Juan, la Policía Federal Argentina y personal de Parques Nacionales para llevar adelante una misión humanitaria con el fin de ayudar a combatir los incendios en diferentes puntos del país trasandino, principalmente el área metropolitana al sur de Santiago, la capital chilena.
El primer contingente de 37 voluntarios arribó a este país el viernes 27 de enero y fue recibido en el aeropuerto por el Canciller de Chile, Heraldo Muñoz, y altos funcionarios de la Comisión Nacional Forestal (CONAF) y de la Oficina Nacional de Emergencia del Ministerio del Interior y Seguridad Pública chileno (ONEMI) quienes encabezan el operativo.
"La asistencia argentina está compuesta por 31 profesionales de la Brigada Federación de Bomberos Voluntarios de la provincia de Córdoba, 30 de la Brigada Agrupamiento de Bomberos Voluntarios de Córdoba, 20 brigadistas de la provincia de Santa Fe, 16 Brigadistas de la Policía Federal Argentina, 12 de la Brigada de la provincia de San Juan y 17 brigadistas de Parques Nacionales. A su vez, las provincias de Córdoba y San Juan desplazaron vehículos todo terreno de ataque de incendio y rescate", añadió la información oficial.
Los equipos argentinos estarán desplegados por 10 días, y son coordinados por el funcionario de Cascos Blancos, Martín Torres, quien además es miembro del Equipo de Evaluación y Coordinación de Naciones Unidas en Casos de Desastres (UNDAC, por sus siglas en inglés) quien se encuentra trabajando en conjunto con ONEMI y CONAF para el despliegue y la operación de las brigadas en el terreno.
En las últimas horas, la Fiscalía de Chile elevó a 65 el número de personas acusadas por los incendios forestales que afectan la zona centro y sur del país, luego de que ocho imputados pasaron el miércoles por controles de detención en las regiones de O'Higgins y el Maule.
La temporada de incendios (desde julio a la fecha) ha dejado 576.245 hectáreas destruidas, de las cuales más de 366.000 pertenecen al megaincendio.
Los incendios han dejado un saldo de al menos 11 muertos, incluidos dos bomberos, dos carabineros (policías militarizados), tres brigadistas y cuatro civiles.
La Oficina Nacional de Emergencia (Onemi) reportó además 1.159 personas albergadas, 3.810 damnificados y 1.103 casas destruidas.
La zona de catástrofe incluye las provincias de Colchagua y Cardenal Caro en la región de O'Higgins y las regiones de El Maule, Biobío y La Araucanía.