SEUL, 3 feb (Xinhua) -- El secretario de Defensa de Estados Unidos, James Mattis, aseguró hoy que el sistema antimisiles, conocido como THAAD, que será desplegado en la República de Corea servirá para proteger a sus aliados y a las fuerzas estadounidenses desplegadas en territorio surcoreano.
El despliegue del controversial THAAD (Terminal de Defensa de Gran Altitud Aérea) ha generado fuertes críticas y una gran oposición por parte de China y Rusia debido a que su radar en banda X puede observar con gran alcance y profundidad en los territorios de esos dos países, rompiendo así el balance estratégico e iniciando una carrera armamentista en la región.
Sumado a esto, los surcoreanos también han realizado una serie de protestas en contra del sistema antimisiles que será desplegado en su país.
Mattis ofreció un discurso antes de la reunión con su homólogo de Corea del Sur, el ministro de Defensa Han Min-koo, en el que reclamó que la República Popular Democrática de Corea (RPDC) continúa con la retórica y las acciones amenazadoras, así como con el lanzamiento de misiles y el desarrollo de su programa nuclear.
Agregó que Estados Unidos tomará medidas defensivas, entre las cuales incluye el despliegue del sistema antimisiles en Corea del Sur para proteger al pueblo surcoreano y a las tropas que tienen allí desplegadas.
El general de cuatro estrellas retirado de la Marina estadounidense llegó el jueves a Seúl en su primer viaje internacional desde que asumió su cargo, hace dos semanas, y luego se desplazará a Japón para una visita de dos días.
El sistema THAAD esta diseñado para derribar misiles entrantes a una altitud de entre 40 y 150 kilómetros, pero la mayoría de los misiles de la República Popular Democrática de Corea se desplazan a una altura menor a ese rango.
Seúl y Washington anunciaron repentinamente en julio del año pasado su decisión de instalar el THAAD en el sureste de Corea del Sur para finales de 2017. Medios locales han especulado que la finalización de los trabajos y el despliegue del sistema antimisiles puede estar listo entre mayo y julio próximos.
Los principales candidatos presidenciales de oposición en Corea del Sur han demandado que el despliegue del sistema THAAD sea cancelado o retrasado hasta que haya un nuevo gobierno, dado que la actual presidenta Park Geun-hye fue destituida en diciembre pasado.