La Organización de las Naciones Unidas (ONU) condenó hoy un ataque suicida lanzado en el exterior del Tribunal Supremo de Afganistán en la capital del país, Kabul, y dijo que "esos despreciables actos deben enfrentar la justicia".
Esta mañana, al menos 13 personas murieron y 25 resultaron heridas cuando un atacante suicida se hizo estallar cerca de la puerta del Tribunal Supremo.
Ningún grupo se ha atribuido la responsabilidad del mortal ataque.
El vocero de la ONU, Stephane Dujarric, dijo en conferencia de prensa que "los ataques indiscriminados contra civiles, incluyendo empleados de instituciones judiciales, constituyen violaciones a los derechos humanos y al derecho humanitario internacional y no se pueden justificar".
"Expresamos nuestras condolencias a las familias de las víctimas y transmitimos nuestra solidaridad al gobierno y al pueblo de Afganistán", expresó Dujarric.