El rey de Arabia Saudí, Salman bin Abdulaziz Al Saud, ordenó hoy a las autoridades gubernamentales correspondientes que permitan a las mujeres la solicitud de servicios sin la aprobación de sus guardianes.
Los procedimientos actuales para recibir diversos servicios gubernamentales incluyen presentar una aprobación por escrito de los guardianes de las mujeres para que sean tramitadas sus solicitudes. Los guardianes pueden ser sus padres, hermanos, esposos, hijos o cualquier otro familiar varón.
A las organizaciones públicas se les pidió que en los tres meses próximos hagan una lista de los servicios que podrían solicitar las mujeres para evaluar si pueden ser incluidos en la orden de acuerdo con las normas islámicas. La acción podría ahorrar problemas a las mujeres, en especial a quienes carecen de guardianes.
La orden también demanda a las organizaciones que brinden servicios de transporte apropiados a sus empleadas, lo que podría reducir los casos de accidentes de tránsito en donde mueran empleadas, sobre todo maestras. Las mujeres suelen contratar a conductores para que las lleven a sus centros de trabajo, pero algunos son imprudentes y ocasionan accidentes.
Arabia Saudí no permite que las mujeres conduzcan y esto ha sido un obstáculo para que muchas de ellas obtengan empleos y desarrollen una vida independiente.