Emmanuel Macron, ex ministro de Economía de Francia de 39 años de edad, ganó hoy la segunda vuelta de las elecciones presidenciales de Francia tras derrotar a su rival de derecha Marine Le Pen, según pronósticos de encuestadoras.
Los pronósticos indican que Macron obtuvo entre 65 y 66,1 por ciento de los votos y Le Pen entre 33,9 y 35 por ciento.
Los resultados convertirán a Macron, quien nunca ha ocupado un cargo por elección, en el octavo presidente de la quinta república francesa y en el líder más joven del motor europeo.
Procedente de una familia de clase media de Amiens, norte de Francia, Macron obtuvo una maestría en Filosofía de la Universidad Nanterre de París y una maestría en Asuntos Públicos del Instituto de Estudios Políticos de París, antes de capacitarse en el servicio de carrera civil en la Escuela Nacional de Administración.
Después de graduarse, Macron trabajó como inspector de finanzas del Ministerio de Economía entre 2004 y 2008.
De 2008 a 2012, Macron trabajó como banquero de inversiones en Rothschild & Cie Banque.
Macron fue asesor de Francois Hollande durante su campaña electoral y posteriormente se convirtió en ministro de Economía de Hollande en 2014.
El presidente electo es uno de los principales responsables de la ley de crecimiento y actividad, así como del Pacto de Responsabilidad, emblemáticas leyes del mapa de ruta del gobierno socialista para reactivar el débil crecimiento y reducir el desempleo en Francia.
Dos años después, Macron dimitió del cargo para postularse a la elección presidencial de 2017 y creó su propio movimiento político "En Marche!", al cual describió como un partido "ni de izquierda ni de derecha".
Macron prometió reducir aún más las altas tasas de desempleo de Francia e incrementar el salario mínimo en 500 euros (549 dólares) anuales mediante una reducción de los impuestos sobre salarios. También desea elevar los impuestos sobre consumo y jubilados acaudalados.
Además, Macron prometió reducir el gasto público en 60.000 millones de euros (65.000 millones de dólares) a fin de apegarse al compromiso de Francia de reducir la proporción del déficit público respecto del producto interno bruto (PIB) al umbral de la eurozona del tres por ciento.
Macron también prometió reducir el impuesto sobre sociedades de 33,3 a 25 por ciento y despedir a 120.000 empleados del servicio público.
Por otra parte, Macron propuso un esquema de inversión pública por valor de 50.000 millones de euros (54.000 millones de dólares) con el fin de mejorar la capacitación, financiar la transición energética y modernizar los servicios administrativos del país.
En cuanto al desempleo, el candidato de centro prometió reducir para 2022 la tasa de desempleo de siete por ciento, en comparación con el 9,7 por ciento actual.
En cuanto a la gobernanza, Macron planea reducir en una tercera parte el número de legisladores tanto del Senado como de la Asamblea Nacional y prohibir la contratación de familiares como asistentes de los legisladores.
Macron también es conocido por su postura a favor de la Unión Europea y prometió "reactivar el proyecto europeo", lo que lo convirtió en el candidato favorito de Bruselas y Berlín durante la campaña.
Macron está casado con Brigitte Trogneux, quien fue su maestra de preparatoria y es 25 años mayor que él.