El ex presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, dijo hoy que consideraba "una farsa" la denuncia en su contra por la supuesta donación a su favor de un departamento tríplex por la constructora OAS.
De acuerdo con algunos fragmentos de su declaración al juez Sergio Moro, de la operación "Lava Jato" (Lavadero), registrados en video y divulgados por la Justicia Federal una hora después de finalizada la audiencia , Lula da Silva dijo que renunció a la compra de la propiedad porque consideraba que el departamento era "inapropiado".
"Considero que este proceso es ilegítimo y la denuncia una farsa, estoy aquí por respeto a la ley y la Constitución, pero con muchas reservas a los fiscales de la Lava Jato", dijo el ex presidente a Moro.
El ex mandatario afirmó que no recibió el inmueble, a pesar de haber visitado el departamento.
"La verdad es la siguiente: no recibí, no pagué y no tengo ningún tríplex", dijo el ex jefe de Estado.
"Imagino que el Ministerio Público (la parte acusadora) en el momento de hablar va a presentar las pruebas. Ellos deben tener por lo menos algún documento que pruebe el derecho jurídico de propiedad para decir que es mi departamento", enfatizó.
Lula también negó haber tratado sobre valores relativos a la remodelación de la propiedad, por lo cual OAS dice que gastó 1,2 millones de reales (unos 375.000 dólares).
El ex presidente se negó a responder a las preguntas del juez sobre las remodelaciones realizadas por OAS en una "chacra" (granja) en la ciudad de Atibaia, que es objeto de investigación en otra causa.
El Ministerio Público acusa a Lula da Silva de haber recibido 3,7 millones de reales (unos 1,15 millones de dólares) en sobornos por parte de la constructora OAS, con la entrega de un departamento tríplex en Guarujá, litoral de Sao Paulo, y por el pago para el almacenamiento de bienes del archivo presidencial de 2011 a 2016.
La defensa y los partidarios del ex presidente afirman que es inocente y que se trata de una persecución política, en la cual están involucrados el juez Moro, los fiscales de la "Lava Jato" y algunos medios de comunicación del país.
La causa contra Lula da Silva es acompañada con gran atención en el país y por la prensa internacional, debido a que su resultado será decisivo para el proceso político brasileño en los próximos meses.
En caso de ser condenado y la sentencia ser confirmada por un tribunal superior, Lula da Silva quedará automáticamente inhabilitado para postularse a las elecciones presidenciales de 2018.