BEIJING, 14 jun (Xinhua) -- El Internet de las cosas, la inteligencia artificial, los hogares inteligentes y los dispositivos ponibles son algunos de los conceptos de alta tecnología iniciados y llevados a cabo por empresas chinas.
Una visita a la recientemente concluida en Shanghai CES Asia, una de las exposiciones más grandes de productos de tecnología avanzada en Asia, ofreció un vistazo al progreso obtenido por China en la manufacturación inteligente, con firmas chinas como Huawei, Baidu y Haier mostrando los últimos frutos de una serie de productos de tecnología sofisticada, entre los que se encontraban los vehículos autónomos.
En el pasado China era conocida como la fábrica del mundo por manufacturar productos de bajo valor. En la actualidad, el país está centrándose en la próxima etapa de su desarrollo con la estrategia "Hecho en China 2025", cuyo objetivo es evitar la "desindustrialización prematura" de acuerdo con Richard Kozul-Wright y Daniel Poon, altos funcionarios de la ONU quienes redactaron recientemente un artículo sobre esta estrategia.
"Si resulta exitosa, (la estrategia) habrá establecido el fundamento institucional para las nuevas fuentes del crecimiento. Y, como los beneficios de la innovación están difundidos por toda la economía, China se acercará a su meta: convertirse en un país de ingresos elevados", escribieron.
La estrategia "Hecho en China 2025", una hoja de ruta emitida por el Consejo de Estado (gabinete chino) en 2015 con el fin de guiar la manufacturación industrial avanzada del país, ha logrado un progreso estable en la capacidad industrial, la manufacturación inteligente, la innovación, así como la calidad de los productos y las marcas.
Un caso relevante fue el avión de creación nacional C919, que realizó su primer vuelo el mes pasado.
"El diseño descendente de la estrategia está en términos generales en forma, con otros planes complementarios avanzando sin problemas", de acuerdo con Xin Guobin, subdirector del Ministerio de Industria y Tecnología Informática.
"Por un lado, China ha venido aumentando las inversión en investigación y desarrollo, lo cual llevó a un rápido crecimiento de patentes e inventos, mientras por otro lado, el país ha logrado avances en el desarrollo de tecnologías, componentes, materiales y técnicas fundamentales", agregó Xin.
La productividad media subió un 38 por ciento para los primeros 109 proyectos piloto de China en la manufacturación inteligente, mientras los costos operativos cayeron un 21 por ciento.
El ministerio ha aprobado doce regiones piloto para la estrategia, entre las que se encuentran ciudades como Ningbo, situada en la provincia oriental de Zhejiang, y tres agrupaciones urbanas en provincias como Jiangsu. Algunas de éstas serán designadas como áreas de muestra nacionales, y tendrán el amparo de políticas favorables para la inversión, la financiación y otros terrenos.
"La estrategia ha sido retratada en ocasiones como un retorno a las prácticas mercantilistas verticales de la vieja escuela y las políticas de substitución de la importación. Pero dicha lectura ignora la experimentación activa que China lleva en las políticas industriales y financieras. De hecho, de esa experimentación se podrán extraer enseñanzas para la evaluación e innovación de las políticas en otros terrenos", sostuvo Kozul-Wright y Poon.
Aun queda mucho espacio para la mejora, sobre todo en la seguridad y estabilidad de ciertos productos. China ha de importar equipos de alto nivel, chips centrales y materiales clave, de acuerdo con Luo Wen, otro alto funcionario del ministerio.
"China priorizará el desarrollo de las nuevas tecnología informática y los nuevos materiales, al mismo tiempo que mantiene una inversión industrial estable, expande el consumo y promueve la cooperación internacional de capacidad", indicó Luo.
La Cámara del Comercio de la Unión Europea alegó en un informe en marzo que el apoyo de China a la manufacturación de alta tecnología podría conducir al empeoramiento del tratamiento a las firmas foráneas, mientras permitiría a los actores nacionales competir injustamente con subsidios gubernamentales.
Sin embargo, muchos han estado deseosos de señalar que el respaldo central a este tipo de industria es una práctica común a escala mundial.
"La orientación y el apoyo financiero del gobierno hacia el sector de la tecnología punta son prácticas comunes en el ámbito global, ya que este mercado implica enormes inversiones y presenta numerosos riesgos e incertidumbres", puntualizó Xin. "Las políticas y medidas incluidas en 'Hecho en China 2025' se pueden aplicar tanto para los negocios nacionales como foráneos, y todas las empresas serán tratadas por igual".