BEIJING, 18 jul (Xinhua) -- La producción de petróleo crudo de China volvió a bajar en junio, ya que las refinerías siguieron reduciéndola debido a la abundancia de la ofreta y los bajos precios del recurso.
La producción del crudo por parte de compañías con ingresos anuales en su negocio principal superiores a los 20 millones de yuanes (2,96 millones de dólares), disminuyó en junio un 2,3 por ciento interanual, hasta los 16,21 millones de toneladas, informó el Buró Nacional de Estadísticas.
No obstante, la reducción fue menos pronunciada que la del 3,7 por ciento registrada en mayo.
Durante los primeros seis meses del año, la producción de petróleo bajó un 5,1 por ciento interanual, hasta los 96,45 millones de toneladas.
En contraste, la producción de carbón crudo aumentó en junio un 10,6 por ciento anual, llegando a 310 millones toneladas, con lo que completó cuatro meses consecutivos de crecimiento, precisó la entidad en una declaración.
En la primera mitad de 2017, la producción de ese recurso aumentó un 5 por ciento interanual, hasta 1.710 millones de toneladas.
En el mes pasado, la producción de gas natural creció un 14,6 por ciento interanual hasta 11.550 millones de metros cúbicos, 4,1 puntos porcentuales más que el aumento de mayo.
Durante el primer semestre, la producción de gas natural subió un 8 por ciento interanual hasta los 74.080 millones de metros cúbicos.
Impulsada por el crecimiento de doble dígito de la generación eléctrica a través de energía nuclear, eólica y solar, la producción de electricidad se incrementó en junio un 5,2 por ciento interanual, llegando a 520.300 millones de kilovatios/hora.
En el periodo enero-junio, la generación eléctrica creció un 6,3 por ciento interanual, con lo que alcanzó los 2,96 billones de kilovatios/hora, según el buró.
El gobierno chino ha intensificado los esfuerzos para luchar contra la contaminación y utilizar más energías limpias.
El país se ha comprometido a reducir las emisiones de carbono por unidad del producto interno bruto entre un 60 y un 65 por ciento en comparación con los niveles de 2005 para cuando llegue 2030. Asimismo, ha prometido elevar la proporción del uso de energía de origen no fósil hasta alrededor del 20 por ciento del consumo total.