BEIJING, 26 jul (Xinhua) -- La Comisión Central de Control Disciplinario (CCCD), el órgano anticorrupción del Partido Comunista de China (PCCh), ha puesto bajo investigación a Sun Zhengcai, ex secretario del Comité Municipal de Chongqing del PCCh, por "graves violaciones de la disciplina".
El anuncio se produjo diez días después del relevo de Sun de su puesto de jefe del Partido de Chongqing y su sustitución por Chen Min'er.
La investigación muestra la determinación del Comité Central del PCCh de gobernar estrictamente el Partido y mostrar que todos son iguales frente a las reglas del Partido.
Sun no es el primer alto dirigente del Partido sometido a investigación. La CCCD ha investigado tanto a funcionarios de bajo nivel, denominados "moscas", como a los altos, apodados "tigres", desde el inicio del actual liderazgo a finales de 2012, cuando se anunció una lucha de alto nivel contra la corrupción.
Entre los tigres caídos en esta campaña se encuentran Zhou Yongkang, un antiguo miembro del Comité Permanente del Buró Político del Comité Central del PCCh; Bo Xilai, ex jefe del Partido de la municipalidad de Chongqing; Xu Caihou y Guo Boxiong, ambos antiguos altos generales y vicepresidentes de la Comisión Militar Central, así como Ling Jihua y Su Rong, exvicepresidentes del máximo órgano asesor político de China.
El manejo de estos casos demuestra que todos son iguales ante las reglas del Partido, y la aplicación de dichas reglas no permite ni privilegios ni excepciones.
Todos y cada uno de los miembros del Partido, no importa ni experiencia ni posición, tienen que obedecer las reglas y disciplinas políticas del Partido. Para garantizarlo, deben tener cuidado en sus palabras y actos, mantenerse políticamente leales y consolidar su sentido de las reglas y disciplinas.
El caso de Sun muestra que no se puede cruzar la línea dibujada por la disciplina del Partido, y no se pueden tomar las reglas a la ligera.
La clave de la gobernanza estricta del PCCh depende de un "reducido grupo clave" de funcionarios dirigentes a nivel central, provincial y local.
Si este grupo es negligente en su trabajo o viola la ley o la disciplina, esta circunstancia no sólo va a corromper a los individuos, sino también a un grupo de cuadros, y contaminará la ecología política de un departamento o una localidad.
Los funcionarios líderes deben tomar la iniciativa en fomentar sus ideales y capacidad política, poniendo en práctica las decisiones del Partido, y respetando absolutamente las reglas del Partido.
Desde 2012, el PCCh ha tomado una serie de medidas para reforzar la gobernanza estricta de sus más de 89 millones de miembros, desde la campaña de frugalidad que ha frenado la extravagancia y mejorado el estilo de trabajo de los funcionarios, a una serie de reglas con el fin de estandarizar los comportamientos de los miembros del PCCh y reducir la corrupción.
Estos esfuerzos han ayudado a los miembros del PCCh a consolidar sus creencias comunistas, adherirse a la línea básica del Partido y ganar la confianza del pueblo.
La estricta gobernanza del Partido es una causa continuada. Aunque ya se han logrado éxitos notables, la situación sigue siendo ardua y es necesario hacer más para eliminar esta plaga que amenaza la propia sobrevivencia del Partido.