KABUL, 1 ago (Xinhua) -- La oficina de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en Afganistán (Unama) y la OTAN se unieron a los afganos en la condena a un ataque de bomba lanzado el lunes contra la embajada de Irak en Kabul y que fue reinvindicado por el Estado Islámico (EI).
"Éste es otro ataque que parece haber sido dirigido contra la comunidad internacional, pero en el cual civiles afganos sufren las consecuencias de la violencia y este ataque muestra el completo menosprecio hacia la vida humana, así como hacia la ley internacional diseñada para proteger a los diplomáticos", declaró el representante especial del secretario general de la ONU para Afganistán y jefe de Unama, Tadamichi Yamamoto.
"Las misiones diplomáticas son instalaciones civiles protegidas por la ley humanitaria internacional, y los ataques dirigidos contra ellas representan graves violaciones que podrían constituir crímenes de guerra", dijo el máximo diplomático de la ONU en Afganistán.
El ataque contra la embajada iraquí en el centro de Kabul causó la muerte a dos empleados civiles de la embajada; cuatro atacantes también murieron en el tiroteo subsecuente, que duró más de tres horas.
Los afganos de todos los sectores de la sociedad, incluido el presidente Mohammad Ashraf Ghani y el ministro de Relaciones Exteriores del país, Salahudin Rabbani, condenaron el ataque en los términos más enérgicos.
El alto representante civil de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), Cornelius Zimmermann, también expresó su condena por el ataque.