XIAMEN, China, 3 sep (Xinhua) -- Los países que integran al BRICS (Brasil, Rusia, la India, China y Sudáfrica) deben colaborar y trabajar más arduamente para crear un nuevo impulso de crecimiento económico en momentos en que el bloque de mercados emergentes está emprendiendo una travesía para anunciar la segunda "década dorada".
Este llamado fue hecho hoy por el presidente chino, Xi Jinping, al inaugurar el Foro de Negocios del BRICS de dos días de duración, antes de una cumbre de los líderes de los cinco países en la ciudad costera de Xiamen, en el sudeste de China.
"Debemos elevar la cooperación del BRICS para crear un nuevo impulso del crecimiento económico en nuestros cinco países", dijo Xi ante más de 1.000 líderes de negocios.
El término BRIC fue acuñado por el ex economista de Goldman Sachs Jim O'Neill en el 2001 y se refería a Brasil, Rusia, la India y China, cuatro economías emergentes con un rápido crecimiento económico y un enorme potencial.
En el 2006, los ministros de Relaciones Exteriores de estos países se reunieron en Nueva York para establecer formalmente la agrupación BRIC. Cuando Sudáfrica se integró en el 2010, el acrónimo cambio a BRICS.
Desde que surgió el mecanismo hace 10 años, los cinco países han mejorado la coordinación en política macroeconómica, promovido la reforma estructural, la cooperación en infraestructura y fiscal, así como impulsado el progreso en las áreas fiscal y financiera.
Con una cooperación y coordinación fortalecidas, las naciones del BRICS han registrado un crecimiento económico robusto y ahora son protagonistas clave en la economía global y en la gobernación mundial.
En la década pasada, el producto interno bruto (PIB) combinado del bloque ha crecido 179 por ciento, el comercio 94 por ciento y la población urbana 28 por ciento, lo que ha contribuido significativamente a estabilizar y a promover el crecimiento de la economía global.
Como el origen de más de la mitad del crecimiento global, el bloque constituía el 23 por ciento de la economía global en el 2016, casi el doble que su proporción de 2006.
Sin embargo, conforme continúan avanzando estas cinco economías han surgido problemas que desafían sus fortalezas tradicionales, desde cuestiones referentes a la asignación de recursos y la estructura industrial a nivel nacional, hasta la demanda global decreciente y mayores riesgos financieros.
Es por eso que Xi declaró que los países BRICS han llegado "a una etapa crucial donde debemos trabajar más arduamente para superar las dificultades".
Para superar esta etapa, los cinco países deben avanzar en la reforma estructural y explorar nuevos motores de crecimiento y caminos de desarrollo, en lugar de concentrarse en la tasa de crecimiento.
Además, deben aprovechar la oportunidad que representa la nueva revolución industrial para promover el crecimiento y cambiar los modelos de crecimiento a través de la innovación.
Xi se refirió a la manufactura inteligente, al modelo de "Internet Plus", a la economía digital y a la economía de compartición como áreas donde las economías emergentes deben construir nuevos motores de crecimiento para sustituir a los viejos.
Asimismo, el presidente pidió eliminar los impedimentos al desarrollo económico a través de la reforma, de la eliminación de los obstáculos sistémicos e institucionales y del fortalecimiento del mercado y de la sociedad, a fin de alcanzar un crecimiento de mejor calidad, más resiliente y sostenible.
Este año, el bloque de mercados emergentes ha logrado progreso en la operación del Nuevo Banco de Desarrollo y del Arreglo de Reserva Contingente, así como en comercio electrónico, facilitación del comercio y de la inversión, comercio de servicios, emisión de bonos en moneda local, innovación científica y tecnológica, cooperación industrial y asociación público-privada.
Aún existe un gran potencial para los países del BRICS, los cuales se encuentran en una etapa de desarrollo similar y comparten las mismas metas de desarrollo para expandir la cooperación y explorar en conjunto formas para estimular el crecimiento impulsado por la innovación.
Los cinco países deben mejorar la coordinación política macroeconómica, crear sinergia entre sus estrategias de desarrollo, apalancar sus fortalezas en términos de estructura industrial y asignación de recursos y crear cadenas de valor y un gran mercado para los intereses compartidos.
Como un mecanismo relativamente joven, el BRICS posiblemente enfrentará más altibajos en el futuro, sobre todo en medio de una recuperación económica global desacelerada y de los reveses en la globalización.
Sin embargo, los países del BRICS no perderán su brillo y la cumbre de Xiamen tendrá lugar justo en el momento oportuno para inyectar un nuevo brillo a los mercados emergentes y a los países en desarrollo, así como para anunciar su nueva década dorada.