ROMA, 4 sep (Xinhua) -- Un hombre y tres adolescentes fueron arrestados en Italia por violación tumultuaria de una turista polaca y por atacar a un transexual peruano en el centro turístico de Rimini la noche del 25 de agosto.
Los brutales ataques han consternado el país y han generado la condena a la política de inmigración del gobierno porque los cuatro sospechosos son originarios de África y uno es un solicitante de asilo.
Un congoleño de 20 años de edad de nombre Guerlin butungu, un nigeriano de 16 años y dos hermanos marroquíes de 15 y 17 años fueron detenidos por su presunta responsabilidad en los violentos ataques ocurridos en una playa y en un parque de esta localidad de la costa adriática en la región de Las Marcas.
Todos enfrentan hasta 20 años de cárcel si son encontrados culpables de ataque agravado, violación tumultuaria y robo, informó la agencia noticiosa italiana ANSA.
Polonia solicitó hoy la extradición de los detenidos por el ataque a la pareja de turistas polacos en el que los cuatro golpearon al hombre y violaron a la mujer para después atacar a la víctima peruana.
La policía dijo que el testimonio de la víctima peruana les permitió arrestar a toda la banda a una semana de los ataques.
Butungu, capturado el domingo en un tren cuando al parecer intentaba huir, negó haber participado en los ataques pero admitió que las imágenes de la cámara de video lo muestran a él y a los demás responsables la noche de los ataques.
Los hermanos marroquíes, quienes se entregaron el sábado pasado y ayudaron a la policía a localizar a los otros dos, señalaron que Butungu los forzó a participar en la violación.
Butungu llegó a Italia en el 2015 luego de ser rescatado en el mar y no tenía antecedentes penales. Pasó un tiempo en un centro de recepción de refugiados en la ciudad norteña de Pesaro donde dijo a los operadores que había sido torturado en el Congo y que ya ano tenía familia, dijo ANSA.
Pero los tres menores eran conocidos por la policía por robar motos, bicicletas y celulares. El padre de los marroquíes, quien se encuentra bajo arresto domiciliario los exhortó a entregarse.
en una entrevista televisada y publicada en el sitio en la red del Corriere della Sera, el padre de los menores culpó al congoleño de incitar a lo menores a delinquir.
El incidente generó una oleada de insultos racistas en las redes sociales.
El alcalde de derecha de la localidad de Pontivrea en la región nororiental de Liguria, Matteo Camiciottoli, sugirió en Facebook colocar bajo arresto domiciliario a Butungu en la casa de Laura Boldrini, presidenta de la cámara baja y defensora de los derechos de los refugiados, y dio a entender que ella también podría ser violada.
El alcalde culpó a la "inmigración descontrolada" de "llevar a nuestro país bestias como esta".
El ministro del Interior italiano, Marco Minniti, exhortó a Boldrini a condenar con energía las palabras del alcalde y pidió al prefecto local "prestar la máxima atención al incidente", informó ANSA.
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