Liu Shunli, Yang Xiao y otro asistente de tienda posan con pasteles en la panadería de Beijing. [Foto de Zou Hong / China Daily]
Tasas bajas
Según el Segundo Censo Nacional de Discapacitados en 2006, las últimas estadísticas disponibles, la tasa de empleo de personas con discapacidad intelectual es inferior al 10%, la más baja entre todos los grupos con discapacidad. Los expertos estiman que la cifra no ha variado en la última década.
Zhang Baolin, presidente de la Asociación China de Personas con Discapacidad Intelectual y Familiares, dijo que las encuestas más recientes realizadas por las ONG también sugieren que la tasa no ha cambiado. "La cifra es aún menor si se tiene en cuenta el 'empleo falso'", dijo, refiriéndose a la práctica por la cual las personas con discapacidad intelectual reciben un salario de los empleadores pero nunca abandonan sus hogares.
Sin embargo, una encuesta realizada durante el X Plan Quinquenal (2001-2005) por XuJiacheng, ex decano del departamento de educación especial de la Universidad Unión de Beijing, mostró que más del 80% de las personas de 18 a 60 años con discapacidad intelectual tiene ganas de trabajar.
"Al final, la mayoría de ellos se queda en casa o acude a instituciones de asistencia cuando se gradúan de escuelas especiales", dijo Xu.
La baja tasa de empleo no es exclusiva de China. Un informe de la Organización Mundial del Trabajo dijo que las circunstancias de los discapacitados intelectuales son "igualmente alarmantes" en todo el mundo, independientemente de la cultura o las circunstancias económicas.
Una encuesta de 2006 de la Asociación Canadiense para la Vida Comunitaria mostró que el 27% de las personas con discapacidad intelectual encontraron trabajo ese año, cifra más baja que cualquier otro grupo de discapacitados.
Según Zhang, la tasa es baja en el contexto de China. "En comparación con los países occidentales, el sistema de bienestar de China no es tan maduro, y un trabajo significa mucho para las personas con discapacidad intelectual y sus familias", dijo, y añadió que el empleo cumple con una necesidad psicológica para las personas del grupo.
Zhang Zhenfei, jefe del departamento de empleo y mitigación de la pobreza de la Federación de Personas Discapacitadas de China, dijo que a pesar de las regulaciones para instar a los empleadores a contratar a más personas con discapacidad intelectual, "la cifra es mucho menor que para las personas con discapacidad física, que es de alrededor del 40%".
En 2007, el Consejo de Estado aprobó el Reglamento sobre el Empleo de Personas Discapacitadas, que exige que las empresas se aseguren de que al menos el 1.5% de sus empleados provengan de grupos con discapacidad.
Los empleadores que no cumplan con el objetivo deben pagar una suma variable al Fondo de Seguridad del Empleo para Personas con Discapacidad. Si una empresa no tiene empleados con discapacidad, la cantidad que paga es igual a los salarios totales pagados el año anterior multiplicados por el porcentaje de empleados con discapacidad estipulados por los gobiernos locales.