BEIJING, 21 feb (Xinhua) -- Mientras Ma, un pasajero con apellido Ma, atravesaba el país de norte a sur viajando desde Beijing hasta Guangzhou en un tren de alta velocidad, tuvo la oportunidad de disfrutar de estofado de cerdo y cabeza de pescado picante, ambos platos típicos de su tierra natal, en la provincia de Hunan.
"Todo lo que tuve que hacer fue sacar mi teléfono móvil y hacer el pedido, y la comida me llegó recién preparada al tren tan pronto paramos en la estación de Changsha (en Hunan)", explica. "Me alegra mucho poder saborear la cocina de mi tierra en un viaje tan largo y agotador como este".
Por estos días China vive su temporada alta de viajes por la Fiesta de Primavera, el Año Nuevo del calendario lunar, la ocasión más importante del año para todas las familias, que se reúnen sin importar cuan lejos vivan de sus lugares de origen.
Según cálculos de las autoridades del sector, en los 40 días de la temporada alta de viajes de este año, que comenzó el 1 de febrero, los chinos harán alrededor de 2.980 millones de viajes. De estos, 390 millones serán en tren, lo que representa un aumento interanual del 8,8 por ciento.
Gracias a los celulares inteligentes, hoy en día quienes viajan en tren ya no necesitan comer tallarines instantáneos, embutidos ni bandejas de almuerzo o comida listas para servir, pues los servicios de entrega de alimentos ya han llegado a los trenes de alta velocidad.
Desde el pasado julio, 27 de las principales estaciones ferroviarias de China lanzaron un servicio piloto de entrega de comidas sobre pedido para los trenes de alta velocidad que pasan por allí.
Pero la sofisticación de los menús no es el único progreso que los móviles inteligentes han representado para los pasajeros de los trenes bala de China durante el auge de viajes de esta temporada festiva.
En las salas de espera de la Estación Ferroviaria de Beijing, no es raro ver a los pasajeros sacudir sus teléfonos. En cuestión de segundos aparece en sus pantallas una página web que les ofrece el horario de los trenes y servicios como el alquiler de sillas de ruedas y la ubicación del depósito de objetos y equipajes perdidos y encontrados.
El programa, integrado a la popular aplicación de micromensajes WeChat, puede también guiar a los pasajeros directamente hacia la sala de espera que les corresponde.
"El servicio a través de los teléfonos inteligentes ha ayudado a los pasajeros a ahorrar tiempo, pues ya no necesitan buscar a un empleado de la estación para pedirle información. Y esto también nos ha ayudado a nosotros a operar con mayor eficiencia", comenta Ma Jianfu, de la oficina de información de la Estación Ferroviaria de Beijing.
Mientras tanto, en la Estación Ferroviaria Oeste de Beijing, se ha empezado a utilizar la tecnología de reconocimiento facial para el chequeo de los billetes a la hora de entrar a las plataformas de abordaje.
Las puertas de acceso se abren automáticamente si el rostro del pasajero coincide con la foto de su documento de identidad.
"El reconocimiento solo toma entre tres y cinco segundos por pasajero", destaca Song Tingting, una empleada de la estación.
De acuerdo con la Corporación de Ferrocarriles de China, entre un 70 y un 80 por ciento de los billetes que se han vendido en esta temporada han sido comprados vía Internet. En un solo día se han llegado a vender casi 10 millones de boletos.
Ma Jianfu, de la estación de Beijing, asegura que la tecnología ha permitido mejorar de forma integral los servicios ferroviarios.
"En esta época de explosión de la tecnología informática y en la que prácticamente cada persona tiene un teléfono inteligente, los empleados ferroviarios debemos ir al ritmo de desarrollo de la sociedad y servir de forma más eficiente a los pasajeros durante la temporada alta de viajes (del Año Nuevo)", concluye Ma.