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Defender los bosques, tarea prioritaria en Cuba

LA HABANA, 21 mar (Xinhua) --- Programas de reforestación, así como leyes y campañas de difusión masiva para la defensa de las zonas verdes, son algunas de las medidas de Cuba para proteger los bosques, cuyo Día Internacional fue celebrado este miércoles en la isla.

De acuerdo con el ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente (Citma), el 69 por ciento del área boscosa de la Mayor de las Antillas aparece dentro de la clasificación de bosques de protección y conservación, especialmente en las cuencas hidrográficas priorizadas, para una mejor atención a los recursos maderables.

La masa forestal tiene cubierto casi un tercio del territorio cubano (el 31 por ciento), lo cual ubica al país antillano entre los primeros a nivel mundial en ese indicador, con 1.500.000 hectáreas ocupadas por árboles maderables, y una tendencia al crecimiento.

De acuerdo con expertos en esa área, esto le permite a la isla poder aserrar como promedio -para necesidades nacionales- unos 130.000 metros cúbicos de madera cada año, sin afectar al medio ambiente.

En el país existe un programa de desarrollo hasta el 2030 que, según los pronósticos, permitirá duplicar los volúmenes actuales de procesamiento de la madera, en una explotación sostenible de esos recursos.

Al mismo tiempo, se han incrementado en los últimos años la producción y exportación de resinas y carbón vegetal, muy demandadas en el mercado internacional, y que a finales de 2017 alcanzaron las 600 y 21.000 toneladas, respectivamente.

De acuerdo con el Grupo Agroforestal del ministerio de la Agricultura (Minag), la ínsula impulsa un programa inversionista superior a los 400 millones de dólares dirigido a mejorar la infraestructura, renovar la tecnología de los 67 aserríos del archipiélago y las plantas para procesar resina, y brindar tratamiento a postes para el sistema eléctrico nacional.

En pos de proteger y desarrollar la masa forestal, el país decidió dedicar otras 165.000 hectáreas a la siembra y cultivo de árboles maderables, a la vez que estableció una política de tala seis veces menor a la cantidad de nuevos árboles plantados, lo cual garantiza el futuro de los bosques y su uso racional y sostenible.

Cuba posee diversos tipos de bosques y una rica flora, con árboles altos, entre estos el cedro, almácigo, jobo, la caoba, guásima, ceiba, yagruma y otros; diversos tipos de palmeras, como la palma real -árbol nacional- y la palma cana, además de los cocoteros, pinos, y un sinnúmero de arbustos y otras plantas.

Dada la importancia de los bosques para el hábitat de muchas especies de la fauna, para la protección de suelos y playas contra la erosión, como purificadores del aire y la construcción de viviendas, puentes, postes y otras edificaciones, además de la exportación de sus derivados, Cuba mantiene leyes contra la tala indiscriminada e ilegal y los daños a su masa verde.

Desde los primeros meses de su triunfo, el gobierno revolucionario dictó medidas para la protección del medio ambiente, en particular de sus áreas forestales, y ha dedicado no pocos recursos al estudio de los bosques, para una mejor preservación.

Ante el avance del desarrollo industrial y las urbanizaciones, la isla no olvida que la salud de un país depende en buena medida de un medio ambiente equilibrado y sano.

Es por ello que la nación caribeña tiene mucho que mostrar cada 21 de marzo, Día Mundial de los Bosques, jornada en la que busca concientizar a todos sobre la importancia que para la vida humana y animal tienen los ecosistemas boscosos.