LA PAZ, 28 mar (Xinhua) -- Ante el aumento de casos confirmados de fiebre amarilla en países vecinos, principalmente Brasil, el Ministerio de Salud de Bolivia, a través del Centro de Enlace, informó hoy miércoles que reforzará los controles fronterizos y las campañas de prevención contra la enfermedad.
La responsable del Centro de Enlace, Yovana Huanca, recomendó a los bolivianos que viajan al exterior o regresan al país, que deben estar vacunados contra la fiebre amarilla y además portar su carnet de vacunación respectivo.
"Se han notificado, durante los últimos meses, casos humanos de fiebre amarilla selvática, por lo que se recuerda que se encuentran vigente las recomendaciones para viajeros a destinos donde existe transmisión activa de este virus y para aquellos que retornan o transitan por áreas con circulación activa", afirmó en entrevista con Xinhua.
Recomendó no exponerse a picaduras de mosquitos y consultar al centro de salud en caso de presentar sintomatología compatible a la enfermedad.
Huanca explicó que la fiebre amarilla es una patología de notificación internacional inmediata, según la normativa del Reglamento Sanitario Internacional.
Indicó que el Ministerio de Salud está reforzando las acciones de vigilancia epidemiológica, prevención y control vectorial, además de acciones enmarcadas dentro las actividades del Programa Ampliado de Inmunizaciones en áreas consideradas de riesgo.
"La fiebre amarilla es una enfermedad vírica aguda, hemorrágica, transmitida por mosquitos infectados. El virus es endémico en las zonas tropicales de Africa y América Latina", explicó.
Por su parte, el responsable del Programa Ampliado de Inmunizaciones (PAI), Boris Chang, dijo a la prensa que la enfermedad está focalizada principalmente en Brasil y que no hay casos en Bolivia.
"La vacuna es la medida más efectiva para prevenir, por eso es importante el control del carnet de vacunas", agregó.
El PAI informó que fortalecerá las medidas preventivas frente a la epidemia de fiebre amarilla desatada en las ciudades brasileñas de San Pablo y Río de Janeiro.
El brote de fiebre amarilla registrado en Brasil sigue en ascenso y desde julio pasado a la fecha el número de muertos es de 260, pese a los esfuerzos del gobierno por inmunizar a millones de personas.
"Mantenemos las acciones de vigilancia en la frontera, sobre todo de los viajeros, que pueden ser portadores de la enfermedad, para lo cual es fundamental la vacunación", indicó Chang.
La vacuna de fiebre amarilla sirve toda la vida, explicó, por lo que no es necesario volver a inmunizarse por segunda vez.