NACIONES UNIDAS, 21 jun (Xinhua) -- El enviado de la ONU en República Centroafricana advirtió hoy que la constante violencia en el país está socavando el proceso político.
Desde febrero ha habido brotes de violencia en todo el país y los grupos armados siguen ejerciendo una influencia negativa en vastas extensiones del territorio, dijo Parfait Onanga-Anyanga, representante especial del secretario general en República Centroafricana, en el Consejo de Seguridad de la ONU.
La volátil situación de seguridad repercute de forma negativa en el proceso político, advirtió. "El país no puede permitirse más enfrentamientos entre grupos armados que buscan oportunidades para saquear y explotar los recursos naturales".
Mientras los órganos del Estado, la base de la fuerza legítima, no sean más fuertes que los grupos ilegítimos y las organizaciones delictivas, los esfuerzos para establecer una paz y estabilidad duraderas en República Centroafricana seguirán siendo desafiados de forma seria. El país espera con desesperación un Estado que funcione y el fin de la impunidad.
El riesgo de intensificación de la violencia y el sufrimiento innecesario infligido a la población exigen constante atención y apoyo de la comunidad internacional, dijo.
Onanga-Anyanga también advirtió que la situación humanitaria en República Centroafricana sigue siendo difícil. Hay más de 688.000 desplazados internos y otros 568.000 refugiados centroafricanos en los países vecinos.
Los ataques contra los trabajadores humanitarios convierten a República Centroafricana en el contexto humanitario más letal del mundo. Además, sólo se ha recaudado el 4 por ciento de los fondos del Plan de Respuesta Humanitaria de 2018.
República Centroafricana libra una guerra civil desde 2012, con combates por diferencias religiosas y étnicas.